Vaca Muerta. Las lecciones de los riesgos ambientales - Piedra OnLine

InformaciĆ³n del Mundo

miƩrcoles, 30 de marzo de 2016

Vaca Muerta. Las lecciones de los riesgos ambientales

Referencia. Un informe del Banco de Desarrollo de AmĆ©rica Latina propone estudiar la experiencia en Estados Unidos para regular la actividad y prevenir impactos. 


Por Por Cristian Navazo

La explotaciĆ³n de Vaca Muerta viene acompaƱada de nuevos desafĆ­os y riesgos en la protecciĆ³n del medioambiente. La experiencia en Estados Unidos, el paĆ­s con mayor avance en el desarrollo no convencional, sirve como referencia a la hora de estudiar las leyes y regulaciones. En Argentina, NeuquĆ©n tiene el marco normativo mĆ”s avanzado en el tema, pero aĆŗn quedan varias aristas por resolver.

SegĆŗn el informe "La explotaciĆ³n del shale y el medioambiente: lecciones de polĆ­tica para AmĆ©rica Latina", elaborado por Jed Bailey, director gerente de Energy Narrative, y Lisa Viscidi, directora del programa de EnergĆ­a, Cambio ClimĆ”tico e Industrias Extractivas del DiĆ”logo Interamericano del CAF-Banco de Desarrollo de AmĆ©rica Latina, mirar lo que se hizo en Estados Unidos puede ayudar a mitigar los impactos en estas tierras.

El estudio destaca que la industria del shale tiene tecnologƭas y procesos que cambian con rapidez, a medida que las compaƱƭas buscan reducir costos e incrementar la productividad de los pozos. Vaca Muerta no es inmune a esa tendencia mundial.

"Una recolecciĆ³n robusta de datos, comunicaciĆ³n proactiva entre los actores industriales y pĆŗblicos y una oportuna divulgaciĆ³n de la informaciĆ³n, como por ejemplo los contenidos de los fluidos del fracking, son tambiĆ©n cruciales", explica el informe.


Argentina es el paĆ­s que mĆ”s urgido estĆ” en adecuarse a las regulaciones ambientales, ya que es el Ćŗnico en LatinoamĆ©rica que produce cantidades comerciales de shale oil, con unos 50.000 barriles de petrĆ³leo por dĆ­a, y Loma Campana es el principal desarrollo masivo en marcha.
Al igual que la industria petrolera tradicional, la exploraciĆ³n y explotaciĆ³n del shale tiene el potencial de daƱar el medioambiente.

NeuquĆ©n es la Ćŗnica provincia que avanzĆ³ en la regulaciĆ³n del shale.

Cuidar el agua


La fractura hidrĆ”ulica utiliza una mezcla de agua, quĆ­micos y aditivos, junto con arena, que hace que las formaciones se pongan en producciĆ³n. Buena parte del volumen retorna a la superficie, usualmente con contaminantes adicionales provenientes de la roca madre, y luego es tratada e inyectada en pozos sumideros o reutilizada en el fracking.

La explotaciĆ³n del shale puede poner en peligro los recursos de agua de varias formas: mediante la disposiciĆ³n inadecuada del lĆ­quido de retorno (flowback), a travĆ©s de la contaminaciĆ³n de acuĆ­feros subterrĆ”neos, o mediante el derrame de quĆ­micos o hidrocarburos.

SegĆŗn indica el documento, bajo una operaciĆ³n normal, el riesgo de contaminaciĆ³n del agua es mĆ­nimo. Cuando el pozo es completado correctamente, la cementaciĆ³n y las caƱerĆ­as previenen la fuga externa de gas o petrĆ³leo. Como los revestimientos se extienden mĆ”s profundamente que cualquier acuĆ­fero, el agua potable no corre riesgo.

En EE.UU., la EPA (Agencia de ProtecciĆ³n Ambiental) supervisa el cumplimiento de estĆ”ndares federales mĆ­nimos en tĆ©rminos de agua ambiental, mientras que los estados tienen requisitos adicionales para la construcciĆ³n y operaciĆ³n de pozos. La EPA exige a las operadoras que inyecten el lĆ­quido de retorno en los pozos sumideros y prohĆ­be su descarga en cuerpos de agua de superficie, como rĆ­os o lagos. Lo mismo se exige en NeuquĆ©n.

En junio del 2015, la EPA publicĆ³ un reporte que resume los resultados de un estudio de varios aƱos, donde destaca que los casos en los que se afectĆ³ al agua fueron menores. Ese borrador, el cual estĆ” ahora bajo revisiĆ³n y comentarios pĆŗblicos, asegura que no hay evidencia generalizada de impactos sistĆ©micos sobre el agua potable.

En ee.uu. preocupa la emisiĆ³n de metano de los pozos de shale.


El riesgo del metano


La explotaciĆ³n del shale puede afectar la calidad del aire por la emisiĆ³n de polvo y gases de escape de los camiones, la quema de combustibles de los motores que bombean el lĆ­quido de fractura y del equipamiento de perforaciĆ³n. TambiĆ©n es riesgosa la ventilaciĆ³n de gases y los fallos en las operaciones.

"La mayor preocupaciĆ³n es la emisiĆ³n de metano, un potente gas de efecto invernadero. Los pozos del shale pueden liberar alrededor de 230 veces mĆ”s gas natural y compuestos orgĆ”nicos volĆ”tiles, que podrĆ­an crear smog y otras poluciones locales, que los pozos tradicionales. Esto se debe potencialmente al reflujo de la mezcla lĆ­quida del fracking", indica el informe de Bayley y Viscide.
El Acta de Aire Limpio (CAA) provee a la EPA de autoridad para establecer estĆ”ndares de calidad para contaminantes de aire especĆ­ficos, asĆ­ como tambiĆ©n permite regular emisiones en las locaciones. Estas regulaciones son revisadas periĆ³dicamente y se han endurecido con el correr de los aƱos.
Las nuevas reglas, que entraron en vigor en 2015, alcanzan a las etapas de finalizaciĆ³n de pozos de gas y tanques de almacenamiento.

TambiĆ©n exigen que las instalaciones petroleras reporten sus emisiones de gases de invernadero (CO2, metano y Ć³xido nitroso) si superan al equivalente de 25.000 toneladas mĆ©tricas de CO2 al aƱo.
En 2015, la EPA tambiĆ©n adelantĆ³ que exigirĆ­an a las compaƱƭas capturar la poluciĆ³n de metano en los nuevos pozos.

En Argentina, las emisiones de gas estĆ”n reguladas y se prevĆ© una serie de multas, pero no se ha avanzado en el control del metano que se libera durante la perforaciĆ³n de los pozos no convencionales.

Tierra


En EE.UU., la mayorĆ­a de los permisos del uso de la tierra son formulados a nivel estatal. Como gran parte de la explotaciĆ³n del shale se lleva a cabo en tierras privadas, las empresas deben recibir permiso del dueƱo para operar. Estos contratos incluyen normas que especifican que la tierra debe regresarse a su estado previo una vez que el pozo deje de ser operacional.

La explotaciĆ³n del shale tambiĆ©n es acusada de causar un incremento en la sismicidad en algunas Ć”reas norteamericanas. "La Encuesta GeolĆ³gica de los Estados Unidos (USGS) se encuentra aĆŗn estudiando este fenĆ³meno, pero parecerĆ­a estar relacionado al uso de pozos de desechos de la mezcla lĆ­quida residual en lugar de al proceso de fractura hidrĆ”ulica en sĆ­ mismo", indica el estudio.
Varios estados incrementaron los requisitos para el monitoreo, denuncia y control del flowback. Algunos exigen revestir con cemento el fondo de los pozos sumideros, para que el fluido no afecte las fallas del subsuelo, de modo de evitar los sismos.

Aplicaciones para Vaca Muerta


El informe destaca que en AmĆ©rica Latina los reguladores y legisladores deben enfocarse en dos Ć”reas: equilibrar las regulaciones centralizadas con flexibilidad y mejorar la transparencia y la difusiĆ³n pĆŗblica.

Al igual que EE.UU., Argentina posee una estructura dual -de nivel federal y provincial- para la regulaciĆ³n ambiental de la actividad petrolera.

El documento destaca que ya hay amplias leyes ambientales que regulan a la industria y que establecen requisitos para las evaluaciones de impacto ambiental, estĆ”ndares para la gestiĆ³n ambiental, el tratamiento de residuos peligrosos y protecciĆ³n de la biodiversidad.
Durante la reforma de la Ley de Hidrocarburos de 2013 se acordĆ³ establecer presupuestos ambientales mĆ­nimos para las explotaciones no convencionales a nivel federal, pero nunca mĆ”s se avanzĆ³ en el tema.

La provincia de NeuquĆ©n es la mĆ”s avanzada y ya promulgĆ³ regulaciones especĆ­ficas. Se exige a las compaƱƭas un informe ambiental para poder obtener la licencia para operar y estĆ” regulado el tratamiento y disposiciĆ³n final del agua de fracking.

El estudio indica que "mientras que el proceso de creaciĆ³n de normas al nivel de legislaciĆ³n federal es lento en Argentina, las regulaciones provinciales tienen el potencial de ser mĆ”s adaptables a sus necesidades especĆ­ficas".

Aprender y adaptar


SegĆŗn Viscidi y Bayley, a pesar de que Estados Unidos aĆŗn lidia con los impactos ambientales de la perforaciĆ³n del shale, la experiencia acumulada proporciona un gran cuerpo de conocimiento sobre las mejores prĆ”cticas que podrĆ­an ser aplicadas en AmĆ©rica Latina.

El modelo estadounidense muestra que los estados fueron capaces de adaptar sus regulaciones rĆ”pidamente a las necesidades locales y a las cambiantes prĆ”cticas industriales. Sin embargo, eso tambiĆ©n tiene sus desventajas, porque las petroleras deben navegar entre la superposiciĆ³n de normas estatales y federales y acatar diferentes regulaciones en cada estado.

El informe seƱala que en Argentina hace falta establecer regulaciones de nivel federal para asegurar estĆ”ndares ambientales mĆ­nimos. Advierte que hay que evitar que la competencia entre las provincias petroleras por atraer las inversiones conduzca a la degradaciĆ³n de regulaciones. AdemĆ”s, indica que las provincias deberĆ”n consolidar una estrategia sĆ³lida para atraer personal tĆ©cnico adecuado para controlar la industria, en un escenario de competencia con las petroleras a la hora de contratar personal calificado.

TambiĆ©n se destaca que el necesario incremento en transparencia tambiĆ©n debe ser equilibrado con una protecciĆ³n de los derechos de propiedad intelectual y secretos comerciales de las compaƱƭas. Y recomienda "introducir requisitos para revelar los fluidos del fracking asĆ­ como recolectar y publicar datos de referencia sobre la calidad del agua, el aire y la superficie terrestre".