Las cuentas en Neuquén no cierran y la desesperada búsqueda de atajos para salir del laberinto, como el de aumentar los aportes previsionales, ponen al descubierto la tensión entre el gobierno provincial de Omar Gutiérrez y el de Horacio "Pechi" Quiroga, intendente de la capital, lo cual pone en evidencia, en un año electoral, las fricciones entre el Movimiento Popular Neuquino (MPN) y la alianza Cambiemos.
El detonante es el proyecto del Instituto Municipal de Previsión Social (IMPS) de la ciudad de Neuquén, para aumentar los aportes y así frenar el incremento del déficit de la caja jubilatoria. En defensa de ese manotazo de ahogado, y tras las críticas que provocó, el secretario de Hacienda de la comuna, José Luis Artaza, salió a decir que "el gobierno provincial es el rey del déficit".
El proyecto fue muy mal recibido tanto por los concejales locales del MPN como por funcionarios provinciales. La reacción de Artaza, quien aspira a competir en 2019 por la jefatura comunal, pareció ser un anticipo de la campaña para las legislativas de octubre.
"Endeudaron a la provincia a niveles alarmantes -dijo-, hipotecaron el futuro de los neuquinos y ahora cuestionan la administración del Instituto, donde el déficit es de la caja jubilatoria, pero el balance 2016 arrojó un superávit de 5 millones de pesos".
Artaza señaló que el gobierno provincial "tendría que estar preocupado en resolver todos los problemas que tienen en la provincia, con los chicos sin clases, sin atención en los hospitales, con calles y rutas cortadas, edificios bloqueados, y sin haber llegado a un acuerdo salarial con los empleados".
