P- ¿La crisis le adelantó los tiempos al peronismo?
R- No, no. La foto estaba programada, pero lo que interrumpió fue la muerte de De la Sota. La crisis va a estar subsistente por bastante tiempo. La reunión tiene que ver la necesidad de la construcción de un espacio que tiene que ser protagonista de la vida política argentina. La necesidad de un peronismo democrático, federal, republicano; de ir a un encuentro de partidos provinciales, locales, de aliados tradicionales, de peronistas que están en el kirchnerismo. La foto fue un paso importante y ahora hay que consolidarlo con una propuesta consistente y llenarla de contenido.
P- Se vio una mesa sin cabecera..
R- Todos estamos a la misma altura y tenemos algunas visiones encontradas. Hubo y hay diferencias, como por ejemplo en el tema del desafuero. Va a haber que procesarlas. Hay que analizar el tema del Presupuesto y tratar de que el impacto sea el menor posible.
P- ¿Este es un espacio en el que hay consenso para aprobar el Presupuesto?
R- En principio, sí. Algunos con un proceso de abstención, otros votando. Pero hay que darle la herramienta al gobierno. Hay que salir del lugar de que la clase política es tan incapaz que no puede votar un Presupuesto en un momento de crisis. El juego del kirchnerismo es romper todo. ¿Y qué logran? Si se cierra el marco del acuerdo, defendiendo los intereses de la región, hay que ser la contrapartida de darles el aire para que el instrumento se vote. Yo he estado reunido esta semana con el gobierno en orden a defender los beneficios patagónicos.
P- ¿Hubo compromisos?
R- He logrado mantener los derechos previsionales. Y hay un compromiso de mantener el beneficio de zona para todas las jubilaciones otorgadas, como derechos adquiridos. Hemos hablado de las universidades, que en promedio se van a actualizar un 33 por ciento; una baja de la retención al sector frutícola con una baja de $4 a $3 y 90 días para pagarla. La continuidad de obras en las rutas 22 y 23, que tiene que estar consignada, el rol de Invap... Un montón de temas.
P- ¿Este diseño puede alterar el principio sobre el tema fueros en el Senado?
R- No. Es una decisión del Senado. Hay que desmitificar ese tema. No hay ningún impedimento en la Argentina para que los jueces condenen y metan presa a una persona, sea senador, diputado o presidente. Hay que tener una condena, como Lula en Brasil.
P- ¿Cómo se van a resolver las candidaturas? ¿Van a abrir a otros espacios?
R- El método va a ser democrático. Primarias abiertas. Por supuesto, abre posibilidades a otros partidos provinciales: llámese MPN, los demócratas de Mendoza, partidos municipales, el socialismo, viejos aliados de peronismo, como la democracia cristiana, el desarrollismo... Todas las fuerzas que quieran estar incluidas en este espacio van a ser bienvenidas. Y todos los peronistas que están en el kirchnerismo también.
P- Massa dijo que es una respuesta a fracaso de Macri.
R- Yo ya he dicho que ella fracasó en lo económico. Y el gobierno de Macri también. Ha logrado una fuerte transferencia del sector laboral al financiero, pérdida de poder adquisitivo, cierre de Pymes. Un proceso de mala praxis económica que nos llevó incluso al Fondo.
P- El acuerdo con el FMI compromete al próximo gobierno: le reduce el financiamiento y le deja un alto nivel de deuda...
R- Es una de las cuestiones a resolver. Los compromisos internacionales tendrán que ser asumidos. De todas maneras se puede recuperar capacidad decisoria, renegociar los acuerdos, las condicionalidades. No todo está escrito en la piedra.
P - ¿El objetivo es llegar al balotaje con Macri?
R- El objetivo es recuperar el gobierno. El peronismo tiene vocación de gobierno. Y producir ambos en orden al modelo de construcción la política, desde un espacio de alternativas, de tener la inteligencia de poder interpretar el tiempo histórico, el mensaje, la oportunidad. El peronismo ha perdido siempre que no supo interpretar los procesos de cambio.
P- El año que viene vence su mandato en el Senado. ¿Dónde se imagina?
R- Me imagino en un proceso de construcción de una opción de poder. No descarto nada. Tengo aspiraciones y vamos a ver hasta dónde se llega. Hay cosas que parecen imposibles y que finalmente se dan. Soy un tipo realista, pero soy el que puso en marcha el mecanismo. El elemento disruptivo fue mi candidatura, porque los muchachos estaban esperando mejores acontecimientos para empezar a opinar. La característica de cara al futuro es la adversidad, no tiempos mejores.
