En oportunidad del lanzamiento de la temporada, el pasado 1 de noviembre, Urrutia había negado carencias para la vigilancia de fauna y, por el contrario, había sostenido que "estamos tomando todas las medidas y acciones para mantener los controles como corresponde".
El presidente de la entidad, Fernando Sosa, y el representante de la misma cámara en el Ente Sanmartiniense de Turismo, Jorge Cardillo, dijeron que es "dramática" la "falta de control total y absoluta del gobierno provincial en el cuidado de los recursos turísticos de la provincia".
En ese sentido, afirmaron que no hay controles. Por ejemplo-explicaron-, en las oficinas de fauna de San Martín de los Andes, el personal no tiene ropa de trabajo, ni vehículos, ni teléfonos, ni nada. Están abandonados.
En contraste, puntualizaron, uno solo de los prestadores de San Martín de los Andes vendió, en menos de 30 días, 25.000 pesos en permisos de pesca. Así mismo explicaron que mediante un reciente decreto, se exige a los guías que quieran trabajar en la provincia inscribirse como prestadores de servicios con una antigüedad mínima de dos años de domicilio legal y comprobable en territorio neuquino.
Sin embargo, "nunca se han visto tantos domicilios especiales, es decir sin residencia comprobada, en la página web de los prestadores de servicios de la provincia, lo que supone por un lado una competencia desleal con los que hacemos todo en regla, y una falta de control de cumplimiento de aquello que el mismo estado exige.
Es disparatado. Asimismo, dijeron que "resulta triste que los prestadores barilochenses vendan en realidad excursiones de pesca que tienen su punto más atractivo en territorio neuquino, y no están inscriptos en la provincia, ni tributan en el Neuquén".
Por ejemplo, "es frecuente ver las balsas que entran al río Caleufú, a la altura de los Álamos(donde nace la jurisdicción neuquina sobre el río), salen en el monumento al Perito Moreno, Cerca de la confluencia en el Collón Curá, y vuelven a Bariloche. No dejan nada en Neuquén y nadie controla la presión sobre el recurso".
El presidente de la entidad, Fernando Sosa, y el representante de la misma cámara en el Ente Sanmartiniense de Turismo, Jorge Cardillo, dijeron que es "dramática" la "falta de control total y absoluta del gobierno provincial en el cuidado de los recursos turísticos de la provincia".
En ese sentido, afirmaron que no hay controles. Por ejemplo-explicaron-, en las oficinas de fauna de San Martín de los Andes, el personal no tiene ropa de trabajo, ni vehículos, ni teléfonos, ni nada. Están abandonados.
En contraste, puntualizaron, uno solo de los prestadores de San Martín de los Andes vendió, en menos de 30 días, 25.000 pesos en permisos de pesca. Así mismo explicaron que mediante un reciente decreto, se exige a los guías que quieran trabajar en la provincia inscribirse como prestadores de servicios con una antigüedad mínima de dos años de domicilio legal y comprobable en territorio neuquino.
Sin embargo, "nunca se han visto tantos domicilios especiales, es decir sin residencia comprobada, en la página web de los prestadores de servicios de la provincia, lo que supone por un lado una competencia desleal con los que hacemos todo en regla, y una falta de control de cumplimiento de aquello que el mismo estado exige.
Es disparatado. Asimismo, dijeron que "resulta triste que los prestadores barilochenses vendan en realidad excursiones de pesca que tienen su punto más atractivo en territorio neuquino, y no están inscriptos en la provincia, ni tributan en el Neuquén".
Por ejemplo, "es frecuente ver las balsas que entran al río Caleufú, a la altura de los Álamos(donde nace la jurisdicción neuquina sobre el río), salen en el monumento al Perito Moreno, Cerca de la confluencia en el Collón Curá, y vuelven a Bariloche. No dejan nada en Neuquén y nadie controla la presión sobre el recurso".
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