La provincia volverá a desarrollar esta droga después de más de una década. La iniciativa surge por un pedido que se realizó desde el hospital. Se destinará sólo para aplicación en pacientes. La iniciativa evaluada y aprobada por Salud fue propuesta por la dirección del hospital Bouquet Roldán y profesionales. (Fabian Ceballos) Será en jarabe y gotas, opciones fáciles de ingerir. Con el tiempo se cubrirá la demanda de todos los pacientes que requieran este medicamento.
Neuquén > Después de varios años la provincia volverá a producir morfina, un medicamento requerido principalmente por los pacientes paliativos. Su puesta en marcha será en el corto plazo y el laboratorio estará en el hospital Bouquet Roldán, donde se preparará la droga en jarabe y gotas.
Así lo confirmaron desde la Subsecretaría de Salud Irene Wietig, directora provincial de Gestión de Tecnologías Biomédicas, y Gustavo Armand Ugon, director de Gestión de Alimentos e Insumos Biomédicos, quienes expresaron que el proyecto es reciente y que traerá enormes beneficios para los pacientes y la salud pública neuquina. Aclararon, además, que no existe un interés comercial sino un beneficio social. “El producto final no se comercializará, será para el uso exclusivo de los pacientes”, indicaron.
Ambos rescataron que el hospital cuenta con el recurso humano capacitado y que sólo falta ajustar mínimas cuestiones relacionadas al espacio físico. También dijeron que la iniciativa surgió desde la dirección del Bouquet Roldán, con colaboración de profesionales del servicio de Cuidados Paliativos para adultos.
“Nosotros tomamos conocimiento hace pocos días a través de un fax que llegó desde el hospital, el cual expresaba la intención de que la provincia volviera a incursionar en la preparación de morfina”, explicó Wietig, quien agregó que “nos pusimos en contacto con la farmacéutica y estamos analizando la factibilidad. La idea es comenzar en un corto plazo dado que no se necesita de grandes inversiones. Lo más importante es tener al personal capacitado para hacerlo y eso está. Sólo habría que acondicionar el lugar y comenzar a caminar con este anhelo”.
Armand Ugon, quien además fue uno de los encargados de preparar la morfina tiempo atrás en el Castro Rendón, indicó que en principio se destinará a pacientes que se atienden en el Bouquet Roldán pero que la idea es llegar al conjunto de los neuquinos que requieran la droga.
“El recurso técnico capacitado existe porque hay una profesional farmacéutica en el hospital. Estamos viendo la posibilidad de acondicionar un espacio físico que reúna los requisitos necesarios para lograr la preparación, que garantice no sólo la estabilidad sino las condiciones indispensables de limpieza, pureza, entre otras cuestiones”, dijo el director de Gestión de Alimentos e Insumos Biomédicos, a lo que Wietig sumó que mientras tanto seguirán abasteciéndose a través de una farmacia, proceso que no sufrirá interrupción.
Si bien su puesta en marcha necesitará de un tiempo de adaptación, las autoridades aseguran que a futuro “la idea es poder preparar morfina para todos los pacientes que la requieran, tanto para quienes pasan por el servicio de Cuidados Paliativos de adultos del Bouquet Roldán o el pediátrico del Hospital Regional”.
Beneficios de primera mano
Armand Ugon explicó que la morfina puede prepararse de distintas maneras. La más común y de mayor utilización es la ampolla, que es un inyectable. Pero también existen en comprimido, jarabe y gotas, por lo general requeridas por los pacientes ambulatorios con el fin de administrársela en forma personal.
Remarcó que históricamente hubo disponibilidad de morfina en ampolla pero que las formas orales básicamente no se encontraban de manera industrial por problemas de estabilidad, ya que se vencían muy rápido. Por esta razón, los laboratorios no la desarrollaban, no les era rentable. “Ésta se prepara en farmacias a través de la receta de un médico, por lo que es específicamente para un paciente. Se pide porque se va a usar”, mencionó el director de Gestión de Alimentos e Insumos Biomédicos, quien, sin embargo, aclaró que como las farmacias desarrollan diferentes medicamentos los tiempos son otros, muchas veces lejos de los deseos de los pacientes. “Siempre dependemos de terceros; por eso consideramos fundamental poder tener nuestro propio laboratorio, lo que nos traerá enormes beneficios tanto para el sistema como para los pacientes”, dijo.
El farmacéutico detalló que si hay una buena provisión de los componentes de las preparaciones se garantizará una provisión fluida de morfina por un período prolongado. También garantizó que no existe un interés comercial sino que se trata de un bien social, por lo que no habrá ninguna baja en la calidad ni una disminución en la concentración. Destacó que al tener acceso directo se podrá reemplazar una preparación que falló en su etapa de producción y que desde el punto de vista farmacéutico hospitalario la iniciativa es “muy valiosa dado que se enmarca al medicamento como una parte más del compromiso del profesional con el sistema”. Por último, dijo que en el futuro habrá margen de acción y que no se dependerá de terceros, como ocurre actualmente con las farmacias.
Wietig remarcó que el sistema cuenta con excelentes profesionales y aseguró que el ministro Daniel Vincent se mostró conforme con la predisposición de ellos. “Acá no sólo se busca disminuir costos; acá se evalúa el paciente y que a éste no le falte o tenga que esperar la llegada de la medicación. El objetivo primordial es que tenga oportunidad de acceso a ésta y que la tenga en el momento que la requiera y necesita”.
Antecedentes
Hace tiempo un laboratorio nacional fabricaba un jarabe de muy buena calidad en forma industrial -como especialidad medicinal- y la provincia de Neuquén, que por ese entonces preparaba morfina en el Castro Rendón, dejó de desarrollarla e incorporó la opción nacional. “En ese momento se decidió abandonar la fabricación porque las condiciones de fabricación que ofrecía el laboratorio -por duración y estabilidad- eran mejores”, explicó Gustavo Armand Ugon, director de Gestión de Alimentos e Insumos Biomédicos, quien agregó que en un momento el laboratorio cambió de firma y abandonó esa producción. “Fue un gran problema porque las farmacias no tienen la capacidad de producción de un laboratorio. Por más que le compres y compres no alcanza. Pero nos queda una alternativa, que es la que pondremos en marcha. Prepararemos morfina en jarabe y en gotas, y eventualmente algún otro preparado que sea útil para paliativos dentro del Bouquet Roldán”, concluyó.
Neuquén > Después de varios años la provincia volverá a producir morfina, un medicamento requerido principalmente por los pacientes paliativos. Su puesta en marcha será en el corto plazo y el laboratorio estará en el hospital Bouquet Roldán, donde se preparará la droga en jarabe y gotas.
Así lo confirmaron desde la Subsecretaría de Salud Irene Wietig, directora provincial de Gestión de Tecnologías Biomédicas, y Gustavo Armand Ugon, director de Gestión de Alimentos e Insumos Biomédicos, quienes expresaron que el proyecto es reciente y que traerá enormes beneficios para los pacientes y la salud pública neuquina. Aclararon, además, que no existe un interés comercial sino un beneficio social. “El producto final no se comercializará, será para el uso exclusivo de los pacientes”, indicaron.
Ambos rescataron que el hospital cuenta con el recurso humano capacitado y que sólo falta ajustar mínimas cuestiones relacionadas al espacio físico. También dijeron que la iniciativa surgió desde la dirección del Bouquet Roldán, con colaboración de profesionales del servicio de Cuidados Paliativos para adultos.
“Nosotros tomamos conocimiento hace pocos días a través de un fax que llegó desde el hospital, el cual expresaba la intención de que la provincia volviera a incursionar en la preparación de morfina”, explicó Wietig, quien agregó que “nos pusimos en contacto con la farmacéutica y estamos analizando la factibilidad. La idea es comenzar en un corto plazo dado que no se necesita de grandes inversiones. Lo más importante es tener al personal capacitado para hacerlo y eso está. Sólo habría que acondicionar el lugar y comenzar a caminar con este anhelo”.
Armand Ugon, quien además fue uno de los encargados de preparar la morfina tiempo atrás en el Castro Rendón, indicó que en principio se destinará a pacientes que se atienden en el Bouquet Roldán pero que la idea es llegar al conjunto de los neuquinos que requieran la droga.
“El recurso técnico capacitado existe porque hay una profesional farmacéutica en el hospital. Estamos viendo la posibilidad de acondicionar un espacio físico que reúna los requisitos necesarios para lograr la preparación, que garantice no sólo la estabilidad sino las condiciones indispensables de limpieza, pureza, entre otras cuestiones”, dijo el director de Gestión de Alimentos e Insumos Biomédicos, a lo que Wietig sumó que mientras tanto seguirán abasteciéndose a través de una farmacia, proceso que no sufrirá interrupción.
Si bien su puesta en marcha necesitará de un tiempo de adaptación, las autoridades aseguran que a futuro “la idea es poder preparar morfina para todos los pacientes que la requieran, tanto para quienes pasan por el servicio de Cuidados Paliativos de adultos del Bouquet Roldán o el pediátrico del Hospital Regional”.
Beneficios de primera mano
Armand Ugon explicó que la morfina puede prepararse de distintas maneras. La más común y de mayor utilización es la ampolla, que es un inyectable. Pero también existen en comprimido, jarabe y gotas, por lo general requeridas por los pacientes ambulatorios con el fin de administrársela en forma personal.
Remarcó que históricamente hubo disponibilidad de morfina en ampolla pero que las formas orales básicamente no se encontraban de manera industrial por problemas de estabilidad, ya que se vencían muy rápido. Por esta razón, los laboratorios no la desarrollaban, no les era rentable. “Ésta se prepara en farmacias a través de la receta de un médico, por lo que es específicamente para un paciente. Se pide porque se va a usar”, mencionó el director de Gestión de Alimentos e Insumos Biomédicos, quien, sin embargo, aclaró que como las farmacias desarrollan diferentes medicamentos los tiempos son otros, muchas veces lejos de los deseos de los pacientes. “Siempre dependemos de terceros; por eso consideramos fundamental poder tener nuestro propio laboratorio, lo que nos traerá enormes beneficios tanto para el sistema como para los pacientes”, dijo.
El farmacéutico detalló que si hay una buena provisión de los componentes de las preparaciones se garantizará una provisión fluida de morfina por un período prolongado. También garantizó que no existe un interés comercial sino que se trata de un bien social, por lo que no habrá ninguna baja en la calidad ni una disminución en la concentración. Destacó que al tener acceso directo se podrá reemplazar una preparación que falló en su etapa de producción y que desde el punto de vista farmacéutico hospitalario la iniciativa es “muy valiosa dado que se enmarca al medicamento como una parte más del compromiso del profesional con el sistema”. Por último, dijo que en el futuro habrá margen de acción y que no se dependerá de terceros, como ocurre actualmente con las farmacias.
Wietig remarcó que el sistema cuenta con excelentes profesionales y aseguró que el ministro Daniel Vincent se mostró conforme con la predisposición de ellos. “Acá no sólo se busca disminuir costos; acá se evalúa el paciente y que a éste no le falte o tenga que esperar la llegada de la medicación. El objetivo primordial es que tenga oportunidad de acceso a ésta y que la tenga en el momento que la requiera y necesita”.
Antecedentes
Hace tiempo un laboratorio nacional fabricaba un jarabe de muy buena calidad en forma industrial -como especialidad medicinal- y la provincia de Neuquén, que por ese entonces preparaba morfina en el Castro Rendón, dejó de desarrollarla e incorporó la opción nacional. “En ese momento se decidió abandonar la fabricación porque las condiciones de fabricación que ofrecía el laboratorio -por duración y estabilidad- eran mejores”, explicó Gustavo Armand Ugon, director de Gestión de Alimentos e Insumos Biomédicos, quien agregó que en un momento el laboratorio cambió de firma y abandonó esa producción. “Fue un gran problema porque las farmacias no tienen la capacidad de producción de un laboratorio. Por más que le compres y compres no alcanza. Pero nos queda una alternativa, que es la que pondremos en marcha. Prepararemos morfina en jarabe y en gotas, y eventualmente algún otro preparado que sea útil para paliativos dentro del Bouquet Roldán”, concluyó.
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