El incendio en los cerros Pirque y Derrumbe, de Chubut, continuaba sin control aunque los especialistas advirtieron que el descenso de temperatura y las lluvias pronosticadas desde hoy y hasta el martes podrían favorecer las tareas para combatir el fuego. Las corrientes de viento rotaron hacia el sur, por lo que el fuego se propagaba en dirección a la localidad de Epuyén, cercana a la zona del incendio, aunque autoridades locales aseguraron a DyN que no existía peligro.
Desde el gobierno se evaluaba a la situación en el lugar en términos estables y destacaron que alrededor de 15 familias que habían sido evacuadas regresaron a sus hogares del paraje denominado Rincón de Lobo, cerca de Puerto Patriada.
Sin embargo, advirtieron que continuaban las evacuaciones preventivas en el área afectada.
El incendio comenzó el martes en un sector de Puerto Patriada, a unos 12 kilómetros de la villa turística El Hoyo y arrasó con más de 2.000 hectáreas de bosques. Allí trabajan unos 300 brigadistas que intentan controlar las llamas.
En las últimas horas se registró en la zona un cambio en la dirección de los vientos, por lo que el fuego se expandía en dirección sur hacia la localidad de Epuyén.
Al respecto, el ministro de Producción Sergio Bohe dijo a DyN que se está lejos de una situación de peligro para la localidad, ya que la separan varios kilómetros y la situación evoluciona con las horas de acuerdo a las condiciones climáticas.
El pronóstico meteorológico prevé lluvias para las próximas horas y estima que perduren hasta el próximo martes, por lo que podrían caer unos 20 milímetros.
El efecto más favorable estaría dado por la baja de temperatura que provocaría el fenómeno y mejoraría las condiciones de lucha contra el foco del incendio. El gobierno había pedido el viernes refuerzos a la Nación y tenía prevista la incorporación de 40 brigadistas chilenos, aunque esta posibilidad fue descartada hoy a raíz de que el fuego en zona de El Paine mantiene una situación de extrema necesidad.
En tanto, en Chubut se esperaba el arribo de unos 40 brigadistas refuerzos provenientes de provincias del norte argentino como Jujuy y Salta. La necesidad de recambio está dada a raíz del cansancio que sufren los brigadistas, al tiempo que la cantidad de efectivos no pueden superar los 300 que actualmente se desempeñan, ya que ello insume mayor demanda logística.
Agencia DyN
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