Un
grupo de cinco mujeres, empleadas del Instituto de Seguridad Social del
Neuquén (ISSN), solicitaron que se aceleren los sumarios contra la
responsable de la entidad en Centenario, Julia Nogueira, por supuestos
casos de maltrato laboral.
Las denuncias se realizaron en la Comisaría Quinta e intervino el
Juzgado de Instrucción Nº5, entre el 2004 y 2008 aunque debido a la
parálisis interna en los sumarios administrativos, las mujeres
ratificaron su testimonio en la sede policial en agosto pasado. (Ampliar en más información)
Las trabajadoras vienen objetando la persecución laboral desde hace años y debido a las consecuencias psicofísicas -respaldadas por certificados médicos y estudios- fueron trasladadas a otros sectores de la obra social en Alta Barda y Cipolletti, para evitar el contacto con la directiva.
Entre algunas de las denuncias, las trabajadoras expusieron la constante “degradación” en público y el hostigamiento al que eran sometidas. “Si no te ponés las pilas, te vas a quedar sin trabajo”, consta en una de las denuncias que repetía la directiva.
Exposiciones
Además, según constan en las denuncias, la directiva habría obligado más de una vez a “pedir permiso” a los superiores para ir al baño o dirigirse a la cocina. También se expusieron negaciones a las empleadas a tomar el artículo 80 del Epecac, que establece el goce de una licencia excepcional una vez por mes a las mujeres.
Las trabajadoras llevaron el caso al fuero sindical, donde el secretario general de ATE, Carlos Quintriqueo, envió una nota el 14 de agosto pasado al presidente de la obra social de los estatales neuquinos, Marcelo Berenguer, para que se aclaren las denuncias.
“Ante la situación que se expresa en las actuaciones policiales, solicitamos en carácter de urgente se arbitren los medios para que cesen en forma inmediata este tipo de actitudes que no hacen más que perjudicar el bienestar de todos”, dijo el sindicalista en la nota.
Sumarios
El 8 de agosto pasado se volvieron a elevar al Departamento Sumarios de la obra social las denuncias por “mobbing”, ya que según manifestó una de las denunciantes, no se encontraban las copias de los expedientes en la sede central.
Se le adjuntó a las exposiciones policiales de 2008 realizadas por las cinco agentes copias de dos certificados neurológicos firmados por un médico neuquino, veinte certificados psiquiátricos, copias de actas de denuncia judicial y diversas notas entregadas a directivos del ISSN.
