Pesca Deportiva en la Provincia de Neuquén.- - Piedra OnLine

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sábado, 20 de octubre de 2012

Pesca Deportiva en la Provincia de Neuquén.-

Pesca Limay
Miles de aficionados a la pesca deportiva de la región transitan de una manera especial el mes de octubre. Los primeros días de noviembre se abre la temporada de pesca y los amantes de esta actividad comienzan a contar los días.

Pero la especie de fiebre que se vive -y cuyo único analgésico es una  escapada a alguno de los espectaculares ambientes de Neuquén y de Río Negro- no sólo afecta a los pescadores sino que son muchas las actividades que, en forma directa o indirecta, también son parte de la pesca deportiva.
Los comercios dedicados a la venta de artículos, guías, dueños de embarcaciones y locales gastronómicos y hoteleros también esperan la pesca, en especial, de los turistas que viajan desde otros países para incursionar en los reconocidos ríos y lagos neuquinos. (Ampliar en más información)
Foto:  http://www.guiafe.com.ar/fotos-argentina/details.php?image_id=1769


Este año, mientras se ultiman detalles del reglamento anual de pesca continental para toda la Patagonia, trascendió –para satisfacción de los pescadores- que el valor del permiso sería el mismo o similar al canon del año pasado.
Al menos en lo que hace a la categoría del residente en el país, el permiso tendría un valor de 80 pesos por toda la temporada.
La pesca deportiva es para Neuquén el segundo producto turístico más importante en materia de ingresos y movimiento económico detrás de la nieve.
Sólo en concepto de venta de permisos de pesca se recaudan en promedio entre 2 y 3 millones de pesos por año, y gran parte de estos recursos vuelven a la actividad a través de equipamiento, recursos e insumos para el personal de Recursos Faunísticos de Neuquén, que es el que realiza los controles a través de los guardafaunas.
Pero esa cifra sólo se refiere a los ingresos oficiales por licencias de pesca. Se estima que la pesca genera varias veces esos montos por el turismo receptivo extranjero y nacional en lo que se refiere a hospedaje, gastronomía, alquiler de embarcaciones, servicios y contratación de guías entre otros conceptos.
Por caso, la contratación del servicio de flotada en alguno de los principales ambientes de pesca de Neuquén puede llegar a costar entre 500 y 700 dólares, a la vez que se sabe que un turista o grupo de pescadores puede llegar a gastar hasta 1.000 dólares por día de pesca en todo concepto.
En la temporada anterior (2011-2012) se comercializaron en Neuquén entre 45 y 50 mil permisos de pesca, mucho menos que en la temporada anterior cuando se pisó casi las 60 mil habilitaciones. De todas formas, la actividad ha crecido en forma sostenida; en la temporada 2005-2006 se vendieron 38.213 permisos, cifra que ascendió a 49.682 licencias en 2006-2007. En la temporada 2009-2010 se alcanzó la cifra histórica de 59.819 permisos.
Como sucede todos los años, es en el mes de noviembre y parte de diciembre es cuando suele darse la mayor demanda en la obtención de los permisos de pesca.  En las últimas temporadas sólo en los primeros días de noviembre se han llegado a comercializar más de 6.500 permisos.
A nivel nacional e internacional, varios ambientes de Neuquén son buscados por los pescadores como los mejores sitios naturales donde poder realizar esta práctica.
Esto es así no sólo por la calidad de los recursos sino por el valor agregado que tiene Neuquén y la Patagonia en general, que es la posibilidad de pescar en medio de extensos paisajes interminables y de gran esplendor.
Pesqueros
Toda la región permite desarrollar las diferentes prácticas como es spinning (cuchara), trolling (arrastre) o fly casting (mosca), y los ambientes neuquinos cuentan con una gran cantidad de especies exóticas y autóctónas como trucha arco iris, marrón, trucha de arroyo o fontinalis y salmón encerrado, pejerrey patagónico y perca.
San Martín de los Andes, Villa La Angostura, Aluminé, Junín de los Andes, Piedra del Águila, Picún Leufú y Villa El Chocón son las ciudades donde se encuentran los principales sitios ya reconocidos para los amantes de esta actividad.
En ríos, la temporada se extiende hasta el 31 de mayo, dando inicio así a la veda, la que es vital para la conservación del recurso ictícola, debido a que la mayoría de las especies desovan en esos cursos de agua. En lagos naturales y embalses, la actividad se puede practicar todo el año con restricciones en cantidad y tallas, tal como lo establece –entre otras disposiciones- el Reglamento de Pesca Deportiva Continental Patagónico.
Algunos de los ambientes ideales para esta práctica son el lago Ramos Mexía (Chocón), Pichi Picún Leufú y Alicurá sobre el Limay.
Ya como parte de la cordillera, los lagos Moquehue y Aluminé y la laguna de Epulauquen  son  algunas  opciones lacustres.
Neuquén también tiene ríos reconocidos por pescadores de otros países. En esa categoría se puede decir que existen dos puntos que figuran en el GPS de cualquier pescador experimentado del país y del exterior, el río Chimehuin (Junín de los Andes) y el Correntoso (Villa La Angostura).
El río Chimehuin se ha ganado, a través de la experiencia de pescadores de distintos países, la fama de  “santuario”. En su descenso cuenta con distintos accidentes como es la conocida Garganta del Diablo. Se sabe que en las aguas del Chimehuin  suelen correr truchas marrones y arco iris que han llegado medir hasta 50 centímetros.
En cuanto a las infracciones que se detectan con mayor frecuencia, están la pesca sin el permiso correspondiente, la actividad en época de veda y la pesca nocturna entre otras. También se citó el caso de la pesca con red.
Colaboración con guardafaunas
Desde la Dirección de Control de Recursos Faunísticos de Neuquén se suelen recordar algunas acciones que ayudan a combatir el furtivismo y, en forma prioritaria, preservar los recursos naturales.
Es así que  funciona una línea en la que se reciben en forma continua cualquier aviso. Se trata del 0800-666-6636. Una vez que se recibe la denuncia, la red interna de la cartera provincial deriva el aviso a la correspondiente regional de fauna del Neuquén.

Didymo

En los últimos años, lo que primero fue un fantasma para los recursos ictícolas de Neuquén y de la Patagonia comenzó a dejar de serlo para convertirse en una amenaza. Hoy, algunos ambientes naturales de Neuquén y de la Patagonia han sido alcanzados por el efecto devastador del Didymo o alga Didymosphenia geminata (o moco de roca).
Se trata de un organismo microscópico oriundo del hemisferio norte y que una vez que llega a un ambiente –río o lago- es casi imposible desterrarlo. Esta alga se deposita en las rocas y al suelo acuático produciendo una sustancia mucilaginosa y masas algodonosas que se va extendiendo en forma rápida. Esto provoca daños muy severos, generando la declinación de poblaciones de peces.
Como si fuera poco, este organismo puede avanzar contra la corriente, por lo que su desplazamiento puede ser en forma ascendente, es decir, en sentido contrario a las corrientes.
Hace uno o dos años, se descubrió uno de los primeros focos en la Patagonia en la zona de Futalauquén (Chubut) y habría ingresado desde Chile, donde esta alga ya afectó a varios ríos y lagos. El año pasado se habría descubierto la presencia en Chimehuin.
El mejor combate, o al menos el control para evitar su propagación, lo pueden hacer los propios pescadores y propietarios de embarcaciones, ya que una de las formas de traslado de este organismo es mediante la adherencia a elementos que se sumergen como equipos o embarcaciones.  Tal como se explica en el Reglamento de Pesca Deportiva Patagónico, es necesario desinfectar los equipos de pesca (waders, botas, líneas, señuelos, belly boats y embarcaciones), ya que el alga se puede adherir a cualquier producto que esté en contacto con el agua. De no realizar una correcta desinfección, el microorganismo sobrevive y se traslada en forma posterior a otro ambiente de pesca.
Por tal motivo, se recomienda, finalizada la jornada de pesca, ya sea en el mismo lugar o en el domicilio, remover todos los restos de barro y algas que puedan estar adheridos a los equipos.
También se puede hacer la limpieza en el domicilio lavando todos los equipos de pesca con agua, lavandina, sal o solución de detergente por varios minutos.
Se aconseja el secado de los equipos de pesca como mínimo 48 horas antes de acceder a un río o lago a pescar. De igual manera, se puede desinfectar la parte inferior de las lanchas o embarcaciones.

Para tener en cuenta
Los permisos de pesca pueden ser adquiridos en distintos puntos de venta. Al momento de obtener el permiso se debe presentar, según el caso que corresponda, fotocopia del DNI, cédula de identidad o pasaporte. En caso de que sea jubilado, deberá presentar fotocopia del documento o carnet de la Anses o recibo de sueldo que acredite su condición de jubilado.

Los mismos se pueden adquirir en muchas bocas de expendio ubicadas en las ciudades de Neuquén.
El valor del permiso Temporada para residente país/País limítrofe es de 80 pesos.

Buenas prácticas

En el reglamento de pesca patagónico, se dedica un capítulo a recordar las buenas prácticas en lo relacionado a la forma de captura, manipulación y devolución de cada pieza.
Tal como aconseja la Asociación Argentina de Pesca con Mosca, para disminuir la agresión en la captura de cada ejemplar se recomienda:
-Evitar llevar a los peces al nivel de agotamiento.
  -Utilizar nylon lo más resistente posible, para sacar al pez rápidamente.
  -Usar anzuelos sin rebaba o con la rebaba aplastada.
  -Evitar sacarlo del agua.
  -Tocarlo lo menos posible y nunca tocar las branquias.
  -Sujetarlo frente a la corriente hasta que escape por sus propios medios.

Algunas restricciones

* Se prohíbe pescar desde embarcaciones en lagos o lagunas dentro de un círculo imaginario de 200 metros de radio con centro en la desembocadura de río o arroyo.
  * Se debe respetar el rotar de las bocas para que todos tengan oportunidad de pescar.
  * En ambientes exclusivos para una modalidad se prohíbe la portación de equipos de pesca que no correspondan a la misma.
  * Está prohibida la caza subacuática.
  * No se debe pescar en ríos o arroyos
debajo de las represas.