"Estoy poniendo todo lo que tengo, más no tengo, estas son las neuronas que tengo, el tiempo que tengo. No me victimizo. Nadie me obligó a estar acá", enfatizó la presidenta Kirchner, al encabezar un acto en la Casa Rosada donde, acompañada por varios de sus ministros, recibió a intendentes bonaerenses de la Segunda, Cuarta, Quinta y Sexta Sección Electoral.
Si bien no mencionó directamente la multitudinaria marcha, que tuvo como epicentro el Obelisco porteño, Cristina Kirchner pareció aludir en varios pasajes a la protesta, especialmente cuando planteó: "Que se encarguen los que no creen en el nuestro (en referencia a su Gobierno) de generar con ideas, con proyectos y con propuestas lo que quiere el resto de la sociedad".
Gobierno temporal
Y, en medio de las críticas a una posible re-reelección, la mandataria agregó: "El Gobierno mío es temporal, lo que no va a ser temporal es este lugar, que es la Argentina, que es la Patria, que es donde van a vivir ellos y sus hijos, que es lo permanente".
A su vez, aseguró que en el país existe una "formidable maquinaria de ocultamiento, de manipulación y de mentira" y le reclamó a la oposición que se encargue de generar "ideas y propuestas" alternativas.
Durante un discurso, que se extendió durante unos 50 minutos en el Salón Mujeres Argentinas del Bicentenario, la Presidenta hizo una encendida defensa de su gestión de gobierno, al asegurar que "democratizó la política" y que por la vigencia de la Asignación Universal por Hijo (AUH) "no se consigue gente para explotar".
"Hasta que él (Néstor Kirchner) llegó acá, nadie creía que las cosas se decidían dentro de los muros de la Casa Rosada. Tuvo lo que tiene que tener un hombre para sentarse en ese sillón y convencer a los argentinos de que las decisiones las tomaba la Casa Rosada. Esto no es una cuestión menor, es fundamental. Es la confianza de la ciudadanía que sabe que el que vota va a decidir, porque cuando uno sabe quién decide tiene a quién reclamarle", enfatizó la jefa de Estado.
