Muchas parejas adolescentes se meten en un gran lío a la hora de tener relaciones sexuales no protegidas. El clásico pensamiento "a mí no me va a pasar", puede interrumpir el desarrollo, estudios y sueños de los jóvenes, quienes se ven forzados a madurar. Para que no tengas que cambiar pañales antes de tiempo, respondemos algunas de las dudas que seguramente han pasado alguna vez por tu mente. (Ampliar en más información)
Mito 1. La mujer no puede quedar embarazada en su primera relación sexual
Sí, sí puede. Y no solo eso, también es frecuente que se piense que una sola vez de sexo no protegido no tiene mayor trascendencia pero es justo esa "única vez" la que conlleva los embarazos no planificados de dos de cada 10 mujeres.
Mito 2. Es imposible quedar embarazada si lo hacemos "de pie"
Tal vez te dé un poco de risa este mito pero, aunque no lo creas, muchas parejas creen que es cierto. Tener sexo de pie es simplemente una variante más de la sexualidad, depende del gusto de la pareja, pero tiene la misma posibilidad de fecundar que estando acostado.
Mito 3. Lavarse los genitales después de la relación sexual impide el embarazo
Esto no sirve más que como un elemento higiénico, la verdad es que es totalmente falso si se pretende utilizar como método anticonceptivo.
Mito 4. El sexo en el mar o alberca impide el embarazo
Error. El agua es más amiga que enemiga de óvulos y espermatozoides. Se trata de un lubricante natural que en lugar de ser barrera, hace más sencilla la fecundación.
Mito 5. Sacar el pene antes de eyacular impide la fecundación
Definitivamente es posible. Basta una pequeña gota de semen con millones de espermatozoides para lograr el embarazo. Recuerden que el líquido pre eyaculatorio también contiene espermatozoides, así que aquello de "nada más la puntita" es también peligroso.
Mito 6. La mujer puede quedar embarazada a través del sexo oral, tragando el semen de la pareja
Falso y no te rías porque, en serio, muchos piensan que esto es cierto. No existe ninguna, ninguna conexión entre el útero y el estómago, así que despreocúpate. Solo se puede acceder al útero, y por consiguiente a los óvulos, a través de la vagina. Sin embargo, ojo, practicar sexo oral inseguro conlleva otros riesgo como la transmisión de enfermedades sexuales, e incluso el sida.
Mito 7. Con el condón no se siente igual
Falso. Esta percepción es más psicológica y cultural que real. Después de la abstinencia, es el método anticonceptivo y de prevención de enfermedades sexuales más seguro. Lamentablemente sólo entre el 30 y 45 por ciento de los mexicanos usan condón a pesar de que reduce 10 mil veces la transferencia de fluidos. Se trata de un prejuicio, pero piénsalo, más vale estar tranquilo antes, durante y después de la relación, que tener una angustiante cruda sexual.
Mito 8. El preservativo se rompe con facilidad
Falso. La industria farmacéutica actual elabora condones bajo controles estrictos de calidad, lo que hace que sea muy difícil su rotura. Es importante conservarlos en temperatura y humedad adecuadas, así como evitar su uso con lubricantes con base en aceite. Un condón que se rompe es porque fue mal puesto.
Mito 9. Los anticonceptivos hormonales dañan la salud, engordan y no es bueno utilizarlos si la mujer es joven
Falso. Los anticonceptivos hormonales ofrecen beneficios como regulación del ciclo menstrual, reducción de cólicos y sangrados. La mayoría evita la retención de líquidos y su efecto antiadrogénico mejora problemas de acné. Pueden usarse sin problema desde la adolescencia, en el inicio de la vida sexual.
Mito 10 El coito anal produce embarazo
Falso. La única forma que tienen los espermatozoides para llegar a la matriz , llegar a las trompas de falopio y fecundar el óvulo es a través del canal vaginal. Pero como todo sexo sin protección tiene otro tipo de riesgos como infecciones de transmisión sexual.