El senador nacional y titular del Sindicato de Trabajadores del Petróleo y Gas Privado de Río Negro, Neuquén y La Pampa, Guillermo Pereyra, se reunió hoy con veinte empresas de transporte de personal que prestan sus servicios en la actividad petrolera, con el objetivo de articular acciones para la inclusión de mujeres en el sector y priorizar el trabajo de las empresas locales.
El año pasado la legisladora Nanci Parrili impulsó un proyecto de ley que establece la obligatoriedad de un cupo femenino del 30 por ciento en la actividad hidrocarburífera. En la actualidad hay 900 mujeres que se desempeñan en diferentes áreas.
“Compartimos plenamente el proyecto. Esta decisión va a estar amparada por el convenio colectivo de trabajo del sector y todas las leyes laborales vigentes”, indicó el senador.
Y agregó que “nuestra intención es proponer gente capacitada de las distintas zonas geográficas de la provincia, y que el ingreso a la industria se vaya profesionalizando sin presión sindical, además de trabajar para la igualdad de género y llegar en forma escalonada al 30 por ciento que establece la ley”.
Pereyra, que además es secretario adjunto de la CGT que conduce Hugo Moyano, destacó que las empresas operadoras "comprometieron su acompañamiento en esta decisión de otorgar prioridad a la incorporación de las mujeres". Por otro lado, indicó que desde el Instituto Patagónico de Formación y Empleo -ubicado en Neuquén capital- se les ofrecerán diferentes alternativas de capacitación, ya sea en materia de conducción de vehículos, Seguridad Vial y asesoramiento y acompañamiento para la obtención de la documentación habilitante.
“Tenemos pedidos de compañeras que quieren trabajar, y creemos que podemos empezar por este sector que es el transporte de personal. La ley es muy genérica; hay actividades que por su rudeza quizás no son las más indicadas para las mujeres pero sí hay otras muchas áreas donde se pueden insertar”, aseguró ante los representantes de las empresas de transporte.
“La experiencia hasta ahora ha sido excelente, la solidaridad de los compañeros con las compañeras es total y hay un marcado sentimiento de protección hacia las mujeres. Nunca debimos lamentar un hecho desagradable en la convivencia laboral”, concluyó.
