"EE.UU. es uno de los paĆses que mĆ”s culpa tiene de la esclavitud moderna", dijo Carter en una entrevista a la cadena MSNBC en la que hablĆ³ sobre su libro dedicado a la discriminaciĆ³n de las mujeres en la sociedad contemporĆ”nea.
Carter dijo que unas 29 millones de personas viven en la esclavitud, 60.000 de las cuales estƔn en EE.UU. El expresidente dijo que 200 niƱas son vendidas como esclavas cada mes solo en la ciudad de Atlanta.
AdemĆ”s en su libro Carter parcialmente acusa a EE.UU. de ser responsable de la violencia a la que se ven sometidas actualmente mujeres de todo el mundo, ya que este paĆs goza de gran influencia internacional.
El expresidente tambiĆ©n ve los problemas de violencia y abusos que ocurren dentro de las fronteras de EE.UU., en particular la falta de una reacciĆ³n adecuada a los abusos sexuales en los campus universitarios y bases militares, que recientemente han alcanzado un punto crĆtico.
"Exactamente lo mismo que sucede en las universidades de EE.UU. sucede en el EjĆ©rcito. Los decanos de las universidades y los comandantes no quieren admitir que, bajo su liderazgo, se estĆ”n perpetrando abusos sexuales", seƱalĆ³ Carter. "Los violadores prevalecen porque saben que no van a ser denunciados."
Carter dijo que unas 29 millones de personas viven en la esclavitud, 60.000 de las cuales estƔn en EE.UU. El expresidente dijo que 200 niƱas son vendidas como esclavas cada mes solo en la ciudad de Atlanta.
AdemĆ”s en su libro Carter parcialmente acusa a EE.UU. de ser responsable de la violencia a la que se ven sometidas actualmente mujeres de todo el mundo, ya que este paĆs goza de gran influencia internacional.
El expresidente tambiĆ©n ve los problemas de violencia y abusos que ocurren dentro de las fronteras de EE.UU., en particular la falta de una reacciĆ³n adecuada a los abusos sexuales en los campus universitarios y bases militares, que recientemente han alcanzado un punto crĆtico.
"Exactamente lo mismo que sucede en las universidades de EE.UU. sucede en el EjĆ©rcito. Los decanos de las universidades y los comandantes no quieren admitir que, bajo su liderazgo, se estĆ”n perpetrando abusos sexuales", seƱalĆ³ Carter. "Los violadores prevalecen porque saben que no van a ser denunciados."