El Juzgado del Menor y la Familia de esta ciudad impidió que dos bebés de la etnia wichí de la localidad de Fortín Belgrano con un alto grado de desnutrición fueran trasladados por la Fundación Corriente Cálida Humanística para ser atendidos en el hospital Garrahan de Buenos de Aires.
Se trata de un complejo caso de dos bebés de 15 meses que fueron abandonados por su madre en medio de una situación extrema de pobreza y sin ningún tipo de asistencia social. Ante esta situación, familiares y miembros de la comunidad wichí de Fortín Belgrano tomaron contacto con la Fundación Corriente Humanística de Buenos Aires, que tiene como a uno de sus referentes al reconocido estilista Claudio Javier Luna, quienes desde hace 7 años llegan hasta el Impenetrable trayendo ayuda humanitaria a comunidades humildes.
Tal fue así que el pasado 5 de marzo el abuelo de los bebés junto a otro familiar realizaron un trámite ante el Juzgado de Paz de la localidad de El Sauzalito autorizando a Javier Luna a llevar a uno de los bebés a la ciudad de Buenos Aires en el periodo desde el 5 de marzo hasta el 31 de julio para que le hiciera brindar atención médica especializada.
Dejan en claro que también le entregan toda la documentación a Luna y que “todo lo hacemos en beneficio del menor ya que si no recibe ayuda médica en forma inmediata no sobrevivirá”, manifiestan.
Ante dicha presentación, la Jueza de Paz de El Sauzalito, Noemí Pérez dio lugar a la autorización de los familiares para que el niño sea trasladado a Buenos Aires en manos del representante de la fundación solidaria. Con esta medida judicial, el niño que apenas pesa 6 kilos, fue trasladado y recibió atención médica en el hospital Garrahan donde incluso inicio un tratamiento.
El representante de la ONG, Javier Luna, explicó que a los pocos días de haber llevado al niño a Buenos Aires, decidió regresar a Castelli por recomendación de sus asesores legales para asegurarse de realizar el trámite permitente ante el Juzgado del Menor y la Familia de esta ciudad. Al llegar se encontró con los familiares que habían traído desde Fortín Belgrano al otro bebé, también con una situación similar en cuanto a su estado de salud.
“La idea de la familia era que también desde la fundación lleváramos al otro bebé para hacerlos tratar juntos en Buenos Aires, pero sorpresivamente nos encontramos con un revés judicial que nos impide brindarle un tratamiento adecuado a estos dos niños que padecen serios problemas de salud y alimentación”, lamentó. Según Luna, “la jueza actuó sin importarle el estado de salud de los nenes, ni siquiera respetó a los familiares, prohibiéndoles que los pudieran ver o estar con ellos”, agregó.
La titular del Juzgado del Menor y la Familia, doctora Gladys Regosky, decidió quitarle la tutela del menor que había sido otorgada por la Jueza de Paz de El Sauzalito y dejar a ambos bebés a disposición del Juzgado y bajo el control de la Dirección de la Niñez, Adolescencia y Familia de esta localidad. De acuerdo con lo expuesto por la doctora Regosky, “se encuentra prohibida la entrega de niños en forma directa y sin intervención de la autoridad judicial competente”. De esta manera, los niños permanecen en Castelli bajo responsabilidad judicial