Uno de los estandartes del kirchnerismo durante la Ćŗltima dĆ©cada aparece amenazado ante la desaceleraciĆ³n econĆ³mica. Con suspensiones que se multiplican e incipientes focos de despidos, el mercado laboral muestra signos de deterioro, segĆŗn la mirada de los expertos. El sector automotriz y el de la construcciĆ³n, de estrellas a estrellados.
El empleo estĆ” en crisis. La Ćŗltima bandera del modelo del que se jacta el Gobierno luce en jaque, con sĆntomas y expectativas negativas para lo que resta del aƱo frente a un contexto que dejĆ³ de ser el que era.
”Cuando Ć©l comenzĆ³ como presidente, yo le decĆa que tenĆa mĆ”s desocupados que votos. Hoy podemos decir que en el Ćŗltimo trimestre del 2013 el Ćndice de desocupaciĆ³n batiĆ³ el rĆ©cord al alcanzar el 6,4% de desocupaciĆ³n, el Ćndice mĆ”s bajo de que tengamos memoria”, destacĆ³ Cristina FernĆ”ndez de Kirchner, durante la apertura de sesiones ordinarias del Congreso en marzo pasado.
Si bien las estadĆsticas oficiales de los Ćndices laborales reflejan el logro alcanzado, partiendo de la crisis de 2001 con un desempleo del 24%, la situaciĆ³n, hoy, ya no es la misma. Y hay datos preocupantes a los cuales el Gobierno debe responder, seƱalan los expertos consultados por 3DĆas.
La economĆa del paĆs dejĆ³ de crecer a tasas chinas, las reservas del Banco Central disminuyeron, las empresas vienen perdiendo competitividad, hay un derrumbe del consumo interno, una suba en las tasas de interĆ©s y la inflaciĆ³n continĆŗa golpeando frente a un retraso cambiario que no se actualiza al mismo ritmo. En ese contexto, el empleo en distintos sectores, como el de la construcciĆ³n y el automotriz, que tanto trabajo generaron, presentan seƱales de estancamiento y hasta de retracciĆ³n, con mĆŗltiples suspensiones e incipientes despidos en las Ćŗltimas semanas.
AsĆ las cosas, se abren distintos frentes que van desde la conflictividad laboral vista en las paritarias frente a una inflaciĆ³n que no da tregua, el descenso del poder adquisitivo, los debates por el impuesto a las ganancias que afectan fuertemente al trabajador, el incremento de despidos y la caĆda en la incorporaciĆ³n de personal. A lo que se suman las cifras de baja calidad del empleo actual.
Desde el propio Gobierno, reconocieron una disminuciĆ³n en el nivel del empleo registrado en empresas privadas durante febrero. La Ćŗltima Encuesta de Indicadores Laborales (EIL) del Ministerio de Trabajo hace referencia a una reducciĆ³n del 0,2%, cifra que muestra un quiebre en la tendencia de crecimiento, que venĆa mostrando la mediciĆ³n en los tres meses anteriores. El informe oficial argumenta que esta disminuciĆ³n se debe a un descenso en la cantidad de incorporaciones de personal, negando que se trate de un aumento en las desvinculaciones.
”Cuando Ć©l comenzĆ³ como presidente, yo le decĆa que tenĆa mĆ”s desocupados que votos. Hoy podemos decir que en el Ćŗltimo trimestre del 2013 el Ćndice de desocupaciĆ³n batiĆ³ el rĆ©cord al alcanzar el 6,4% de desocupaciĆ³n, el Ćndice mĆ”s bajo de que tengamos memoria”, destacĆ³ Cristina FernĆ”ndez de Kirchner, durante la apertura de sesiones ordinarias del Congreso en marzo pasado.
Automotrices, en la mira
Sin embargo, algunos sectores ya se estƔn viendo afectados por suspensiones y despidos. El caso mƔs destacado es el de la industria automotriz, con empresas como Volkswagen, Peugeot, Iveco, Fiat, Renault y General Motors que ya estƔn aplicando un esquema de suspensiones y hasta de retiro voluntario para sus empleados.
Tanto la industria automotriz como la de la construcciĆ³n fueron grandes generadoras de fuentes de trabajo durante la llamada “dĆ©cada ganada”, pero ahora el escenario es otro. Desde la cartera que dirige Carlos Tomada afirmaron que el empleo registrado en la construcciĆ³n, en el primer trimestre del aƱo cayĆ³ 6,3% respecto al mismo perĆodo del aƱo pasado. Luego de cincos meses en terreno positivo, la actividad de la construcciĆ³n volviĆ³ a destruir empleo en el primer bimestre de 2014. Este retroceso de la ocupaciĆ³n sectorial refleja el pobre desempeƱo de la actividad de la construcciĆ³n, tendencia que continuarĆa a lo largo de todo el aƱo, seƱala un informe de la consultora Abeceb, que considera a la construcciĆ³n como uno de los perdedores del 2014.
Mariano Lamothe, gerente de AnĆ”lisis EconĆ³mico de Abeceb, advierte que “hasta el tercer trimestre del aƱo, el paĆs atravesarĆ” la peor etapa en lo que respecta a la disminuciĆ³n de empleo, aunque niega que se trate de una crisis general al no observar una recesiĆ³n profunda. HabrĆ” heterogeneidad en el tema de empleo porque algunos sectores se verĆ”n mĆ”s afectados y forzados a realizar despidos, mientras que otros intentarĆ”n evitar lo mĆ”s posible esta instancia porque reconocen el riesgo de perder empleados calificados”, seƱala el economista. Por otro lado, indica que existen sectores, como el del empleo pĆŗblico, por ejemplo, que creĆ³ muchos puestos de trabajo con el kirchnerismo, que no corren riesgos. “A lo sumo, perderĆ” poder adquisitivo el salario y seguirĆ”, como en los Ćŗltimos aƱos, sin generar nuevos empleos“, agrega.
Por otra parte, Lamothe destaca la polĆtica contracĆclica que mantuvo el Gobierno frente a la crisis internacional de 2009. “Fue muy buena y le permitiĆ³ salir mĆ”s rĆ”pido de la recesiĆ³n y evitar que el humor social se revierta, lo cual es muy importante para una economĆa”, explica. Aunque sostiene que la creaciĆ³n de empleo a partir de ese entonces fue muy puntual y que, hoy, el contexto es otro.
Para el economista, la lĆ³gica para reactivar la economĆa y, por lo tanto, la productividad y el mercado laboral, serĆa a partir de inversiones difĆciles de conseguir, frente a la muy baja credibilidad de la economĆa polĆtica del paĆs. A su vez, manifiesta que el Gobierno hoy no tiene muchas herramientas como sĆ tenĆa en 2009, sobre todo frente al dĆ©ficit fiscal que presenta como materia pendiente a solucionar.
Tanto la industria automotriz como la de la construcciĆ³n fueron grandes generadoras de fuentes de trabajo durante la llamada “dĆ©cada ganada”, pero ahora el escenario es otro. Desde la cartera que dirige Carlos Tomada afirmaron que el empleo registrado en la construcciĆ³n, en el primer trimestre del aƱo cayĆ³ 6,3% respecto al mismo perĆodo del aƱo pasado. Luego de cincos meses en terreno positivo, la actividad de la construcciĆ³n volviĆ³ a destruir empleo en el primer bimestre de 2014. Este retroceso de la ocupaciĆ³n sectorial refleja el pobre desempeƱo de la actividad de la construcciĆ³n, tendencia que continuarĆa a lo largo de todo el aƱo, seƱala un informe de la consultora Abeceb, que considera a la construcciĆ³n como uno de los perdedores del 2014.
Mariano Lamothe, gerente de AnĆ”lisis EconĆ³mico de Abeceb, advierte que “hasta el tercer trimestre del aƱo, el paĆs atravesarĆ” la peor etapa en lo que respecta a la disminuciĆ³n de empleo, aunque niega que se trate de una crisis general al no observar una recesiĆ³n profunda. HabrĆ” heterogeneidad en el tema de empleo porque algunos sectores se verĆ”n mĆ”s afectados y forzados a realizar despidos, mientras que otros intentarĆ”n evitar lo mĆ”s posible esta instancia porque reconocen el riesgo de perder empleados calificados”, seƱala el economista. Por otro lado, indica que existen sectores, como el del empleo pĆŗblico, por ejemplo, que creĆ³ muchos puestos de trabajo con el kirchnerismo, que no corren riesgos. “A lo sumo, perderĆ” poder adquisitivo el salario y seguirĆ”, como en los Ćŗltimos aƱos, sin generar nuevos empleos“, agrega.
Por otra parte, Lamothe destaca la polĆtica contracĆclica que mantuvo el Gobierno frente a la crisis internacional de 2009. “Fue muy buena y le permitiĆ³ salir mĆ”s rĆ”pido de la recesiĆ³n y evitar que el humor social se revierta, lo cual es muy importante para una economĆa”, explica. Aunque sostiene que la creaciĆ³n de empleo a partir de ese entonces fue muy puntual y que, hoy, el contexto es otro.
Para el economista, la lĆ³gica para reactivar la economĆa y, por lo tanto, la productividad y el mercado laboral, serĆa a partir de inversiones difĆciles de conseguir, frente a la muy baja credibilidad de la economĆa polĆtica del paĆs. A su vez, manifiesta que el Gobierno hoy no tiene muchas herramientas como sĆ tenĆa en 2009, sobre todo frente al dĆ©ficit fiscal que presenta como materia pendiente a solucionar.
Proyecciones negativas
Conforme a este escenario, y en un contexto de retracciĆ³n de la economĆa, Juan Pablo Paladino, jefe de Investigaciones de EconomĆa y Finanzas de Ecolatina, plantea dos escenarios: uno optimista y otro mĆ”s pesimista. Si bien, para 2014, estima que habrĆ” un estancamiento en la creaciĆ³n de empleo y un aumento de la tasa de desempleo, seƱala que, en el mejor de los casos, puede que los problemas del mercado laboral no se profundicen, aunque descarta un escenario de creaciĆ³n neta de puestos de trabajo para el segundo semestre.
A su vez, considera que si la situaciĆ³n actual se profundiza, medidas como el Repro (el programa del Ministerio de Trabajo que subsidia a empresas para que mantengan el nivel de empleo) o la doble indemnizaciĆ³n puedan volver a aparecer en la agenda del empresariado.
Es que a los despidos que se vienen registrando hasta ahora se le estarĆan sumando nuevas desvinculaciones en los prĆ³ximos meses, segĆŗn la Ćŗltima encuesta sobre gestiĆ³n de recursos humanos de SEL Consultores, realizada en abril.
El estudio indica que el 15% de las compaƱĆas lĆderes del paĆs esperan disminuir su dotaciĆ³n en lo que resta del aƱo. En este mismo perĆodo de 2013, esta cifra fue del 8%. “PrĆ”cticamente, se duplicĆ³ el nĆŗmero de empresas que proyectan despidos”, asegura MarĆa Laura CalĆ, directora Ejecutiva de SEL Consultores, en diĆ”logo con 3DĆas. TambiĆ©n revela que se registrĆ³ un incremento en la suspensiĆ³n de turnos y despidos por razones econĆ³micas, con picos del 14% en el sector de bienes durables en ambos casos. Otras medidas con incidencia creciente , segĆŗn el informe, son la suspensiĆ³n del ingreso de nuevo personal, que alcanzĆ³ el 31%, unos nueve puntos por encima del primer trimestre del aƱo. En tanto, la reducciĆ³n de horas extras, serĆ” implementada por el 29% de las empresas lĆderes que participaron del sondeo.
Cuando se les preguntĆ³ por las causas que gatillan estas medidas en su personal, mĆ”s de la mitad de las empresas (58%) encuestadas argumentĆ³ que lo hacen debido a la caĆda de sus ventas, mientras que el 33% sostiene que lo hace frente a la incertidumbre que la provoca la evoluciĆ³n de la economĆa.
“Considerando que el 75% de las compaƱĆas que participan de la muestra son multinacionales“, aclara CalĆ, “es importante destacar que 2 de cada 3 de ellas reconociĆ³ que la reducciĆ³n de la dotaciĆ³n de personal se debe a decisiones de alcance local a partir de la coyuntura del paĆs, y no por cuestiones del contexto internacional“.
Otro indicador que confirma la debilidad del mercado laboral son las contribuciones realizadas a la Seguridad Social. SegĆŗn un informe del Banco Ciudad, esta recaudaciĆ³n totalizĆ³ $ 22.207 millones en abril, experimentando un crecimiento de sĆ³lo 19% y marcando la cuarta desaceleraciĆ³n consecutiva. AdemĆ”s, estas cifras posicionan al ritmo de crecimiento de las contribuciones a la seguridad social mĆ”s de 10 puntos porcentuales por debajo del aumento acumulado en 2013, que fue del 31%, al mismo tiempo que marca un pronunciado descenso en tĆ©rminos reales del 14%, seƱala el trabajo.
“Este pobre comportamiento parece ser el resultado del deterioro de las condiciones en el mercado laboral, asĆ como un probable aumento en los niveles de incumplimiento previsional”, completan desde el Banco Ciudad.
A su vez, considera que si la situaciĆ³n actual se profundiza, medidas como el Repro (el programa del Ministerio de Trabajo que subsidia a empresas para que mantengan el nivel de empleo) o la doble indemnizaciĆ³n puedan volver a aparecer en la agenda del empresariado.
Es que a los despidos que se vienen registrando hasta ahora se le estarĆan sumando nuevas desvinculaciones en los prĆ³ximos meses, segĆŗn la Ćŗltima encuesta sobre gestiĆ³n de recursos humanos de SEL Consultores, realizada en abril.
El estudio indica que el 15% de las compaƱĆas lĆderes del paĆs esperan disminuir su dotaciĆ³n en lo que resta del aƱo. En este mismo perĆodo de 2013, esta cifra fue del 8%. “PrĆ”cticamente, se duplicĆ³ el nĆŗmero de empresas que proyectan despidos”, asegura MarĆa Laura CalĆ, directora Ejecutiva de SEL Consultores, en diĆ”logo con 3DĆas. TambiĆ©n revela que se registrĆ³ un incremento en la suspensiĆ³n de turnos y despidos por razones econĆ³micas, con picos del 14% en el sector de bienes durables en ambos casos. Otras medidas con incidencia creciente , segĆŗn el informe, son la suspensiĆ³n del ingreso de nuevo personal, que alcanzĆ³ el 31%, unos nueve puntos por encima del primer trimestre del aƱo. En tanto, la reducciĆ³n de horas extras, serĆ” implementada por el 29% de las empresas lĆderes que participaron del sondeo.
Cuando se les preguntĆ³ por las causas que gatillan estas medidas en su personal, mĆ”s de la mitad de las empresas (58%) encuestadas argumentĆ³ que lo hacen debido a la caĆda de sus ventas, mientras que el 33% sostiene que lo hace frente a la incertidumbre que la provoca la evoluciĆ³n de la economĆa.
“Considerando que el 75% de las compaƱĆas que participan de la muestra son multinacionales“, aclara CalĆ, “es importante destacar que 2 de cada 3 de ellas reconociĆ³ que la reducciĆ³n de la dotaciĆ³n de personal se debe a decisiones de alcance local a partir de la coyuntura del paĆs, y no por cuestiones del contexto internacional“.
Otro indicador que confirma la debilidad del mercado laboral son las contribuciones realizadas a la Seguridad Social. SegĆŗn un informe del Banco Ciudad, esta recaudaciĆ³n totalizĆ³ $ 22.207 millones en abril, experimentando un crecimiento de sĆ³lo 19% y marcando la cuarta desaceleraciĆ³n consecutiva. AdemĆ”s, estas cifras posicionan al ritmo de crecimiento de las contribuciones a la seguridad social mĆ”s de 10 puntos porcentuales por debajo del aumento acumulado en 2013, que fue del 31%, al mismo tiempo que marca un pronunciado descenso en tĆ©rminos reales del 14%, seƱala el trabajo.
“Este pobre comportamiento parece ser el resultado del deterioro de las condiciones en el mercado laboral, asĆ como un probable aumento en los niveles de incumplimiento previsional”, completan desde el Banco Ciudad.
Mala calidad
Los expertos consultados coinciden en que el bajo desempeƱo de la economĆa genera tanto un proceso de destrucciĆ³n neta de puestos de trabajo como un aumento en la precarizaciĆ³n laboral. Al respecto, desde el Instituto para el Desarrollo Social Argentino (Idesa) aseguran que de los 100.000 nuevos puestos de trabajo creados en 2013, apenas un cuarto fueron empleos asalariados privados registrados.
En tanto, el empleo de calidad aporta solo 1 de cada 4 nuevos puestos de trabajo, una significativa profundizaciĆ³n de la desaceleraciĆ³n de empleo y una abrupta caĆda en calidad, si se considera que entre 2004 y 2008, se crearon 250.000 nuevos puestos de empleos privados registrados. “La poca generaciĆ³n de empleos de calidad se debe principalmente al vetusto diseƱo de la protecciĆ³n laboral en la Argentina. El empleo formal es penalizado con burocracia, litigiosidad y altos impuestos al trabajo”, seƱala el informe.
Jorge Colina, jefe de Investigaciones de Idesa, enfatiza sobre la necesidad de mejorar las relaciones de trabajo y bajar los costos que representan los impuestos al empleo, mucho mĆ”s de lo que propone el proyecto de ley de reducciĆ³n de contribuciones patronales.
“La reducciĆ³n es muy tĆmida para el alto peso que tienen las cargas sociales en los costos del sistema productivo, y para el estancamiento de la actividad econĆ³mica que se estĆ” atravesando. Se deben establecer mĆnimos no imponibles a las cargas sociales para disminuir la presiĆ³n impositiva de forma progresiva. AsĆ se puede reducir mucho mĆ”s sustancialmente el costo no salarial de los puestos de trabajo y estimular su creaciĆ³n”, argumenta el experto.
La informalidad laboral es un tema pendiente para la administraciĆ³n de Cristina Kirchner, que no solo no logrĆ³ descender sino que ademĆ”s amenaza con profundizarse frente a la actual caĆda de la actividad. Colina sostiene que para recuperar el empleo asalariado formal estancado es necesario reactivar el nivel de actividad y tomar medidas mĆ”s profundas para mejorar la competitividad de las empresas.
Son muchas las medidas que debe tomar el Gobierno para defender la Ćŗltima bandera del modelo, mientras los recursos se agotan y los mĆ”rgenes de maniobra se achican, seƱalan los especilalistas. En tanto, los frentes se diversifican y habrĆ” que ganar cada batalla para reactivar la actividad econĆ³mica y recuperar el empleo de calidad, en defensa de los puestos de trabajo frente a un contexto marcado por la incertidumbre y la alta inflaciĆ³n.
En tanto, el empleo de calidad aporta solo 1 de cada 4 nuevos puestos de trabajo, una significativa profundizaciĆ³n de la desaceleraciĆ³n de empleo y una abrupta caĆda en calidad, si se considera que entre 2004 y 2008, se crearon 250.000 nuevos puestos de empleos privados registrados. “La poca generaciĆ³n de empleos de calidad se debe principalmente al vetusto diseƱo de la protecciĆ³n laboral en la Argentina. El empleo formal es penalizado con burocracia, litigiosidad y altos impuestos al trabajo”, seƱala el informe.
Jorge Colina, jefe de Investigaciones de Idesa, enfatiza sobre la necesidad de mejorar las relaciones de trabajo y bajar los costos que representan los impuestos al empleo, mucho mĆ”s de lo que propone el proyecto de ley de reducciĆ³n de contribuciones patronales.
“La reducciĆ³n es muy tĆmida para el alto peso que tienen las cargas sociales en los costos del sistema productivo, y para el estancamiento de la actividad econĆ³mica que se estĆ” atravesando. Se deben establecer mĆnimos no imponibles a las cargas sociales para disminuir la presiĆ³n impositiva de forma progresiva. AsĆ se puede reducir mucho mĆ”s sustancialmente el costo no salarial de los puestos de trabajo y estimular su creaciĆ³n”, argumenta el experto.
La informalidad laboral es un tema pendiente para la administraciĆ³n de Cristina Kirchner, que no solo no logrĆ³ descender sino que ademĆ”s amenaza con profundizarse frente a la actual caĆda de la actividad. Colina sostiene que para recuperar el empleo asalariado formal estancado es necesario reactivar el nivel de actividad y tomar medidas mĆ”s profundas para mejorar la competitividad de las empresas.
Son muchas las medidas que debe tomar el Gobierno para defender la Ćŗltima bandera del modelo, mientras los recursos se agotan y los mĆ”rgenes de maniobra se achican, seƱalan los especilalistas. En tanto, los frentes se diversifican y habrĆ” que ganar cada batalla para reactivar la actividad econĆ³mica y recuperar el empleo de calidad, en defensa de los puestos de trabajo frente a un contexto marcado por la incertidumbre y la alta inflaciĆ³n.