Tal como fuera pactado el viernes pasado, el senador nacional por el Movimiento Popular Neuquino, Guillermo Pereyra, mantuvo hoy una reunión de más de dos horas en la sede del Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Río Negro, Neuquén y La Pampa con los trabajadores afiliados a la UOCRA que ese día mantenían cortada la ruta 22, en reclamo por la incorporación de mano de obra local a las construcciones que se vienen realizando en dichas localidades y de la gestión de nuevos puestos de trabajo.
El senador les agradeció la confianza demostrada por haber levantado el corte en ocasión de la inauguración del sanatorio de Plaza Huincul, y aseguró que “desde nuestra organización sindical nos hemos puesto a disposición y vamos a trabajar en conjunto para que cuando aparezcan las obras de construcción entre a trabajar esta gente, independientemente de otros puestos que se puedan ir gestando”.
Además, Pereyra resaltó la necesidad de acceder a canales de diálogo que permitan lograr soluciones a la falta de trabajo y comprometió su máximo esfuerzo en lograr respuestas concretas que ayuden a superar las dificultades laborales que atraviesan más de dos mil personas en la comarca, según le manifestaron los dirigentes obreros. “En todo lo que sea relacionado a las obras de construcción en los yacimientos, los compañeros están manifestando que están quedando afuera y no encuentran un canal de diálogo de alguien que los pueda escuchar e ir solucionando los problemas”, explicó
Por ello se comprometió a intermediar con las empresas petroleras que demanden trabajadores de la construcción, para que le den prioridad a éste grupo de personas "y que poco a poco puedan superar el desánimo que hoy embarga a numerosas familias de trabajadores ex UOCRA, por el abandono de sus dirigentes", según le manifestaron, y “para que encuentren un canal de diálogo que los pueda llevar a poder trabajar, que es lo más digno que hay”, sintetizó el líder sindical.
Y recordó que hace tiempo que estos trabajadores procuran que se respete la mano de obra local en los yacimientos no convencionales, en los que ya se encuentran trabajando más de 500 extranjeros en las áreas de fracking, perfilajes y cementación con las nuevas tecnologías. “Nosotros estamos pidiendo que vengan a capacitar pero que regresen, no que se queden cubriendo puestos que son de Convenio colectivo de Trabajo”, concluyó Pereyra.