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La semana pasada la Presidenta inauguró la nueva terminal de ómnibus de San Salvador de Jujuy, bautizada Néstor Carlos Kirchner. No era la primera estación terminal con ese nombre. Hay otras cuatro en Santiago del Estero, San Rafael (Mendoza), La Cocha (Tucumán) y Marcos Juárez (Córdoba) que llevan el nombre del ex presidente fallecido hace poco más de tres años. Uno ya puedeplanificar un viaje por el país a través de terminales Néstor Kirchner.
Decenas de obras, nuevas o viejas, fueron bautizadas y rebautizadas en su honor en este tiempo. Calles, avenidas, terminales, aeropuertos, estadios, rotondas, centros culturales y mucho más. Era tiempo decomenzar a recopilar la toponimia Néstor Kirchner de la patria. Con unas pocas fotos armé en Tumblr el blog “Ponele Néstor a todo”(ponelenestoratodo.tumblr.com) y comencé a recibir en @leomindez una lluvia de colaboraciones desde todo el país con el Néstor Kirchner de cada barrio.
Hay de todo. Criterios estéticos disímiles en los monumentos que representan al ex presidente en Rio Gallegos, Avellaneda, Rio Turbio, la Estación Plátanos en Barazategui, el pueblo de Anisacate en las sierras cordobesas o la capital formoseña. Obras de infraestructura menores como una rotonda de tierra en Comodoro Rivadavia, una ruta de enlace de 35 kilómetros cerca de Olavarría, un paso bajo nivel en Caseros o un distribuidor de tránsito en Vicente López.
Hay un “NéstorKlub” en Roldán (Santa Fe) y una “pileta climatizada” bautizada con su honor en Apóstoles (Misiones). El gimnasio polideportivo de Palpalá (Jujuy) lleva el pomposo nombre de “Estadio Olímpico Municipal Presidente Néstor Kirchner” y en una mojada de oreja bien peronista, también bautizaron Kirchner al polideportivo de Anillaco (La Rioja), el pueblo natal de Carlos Menem, que ya le había puesto su nombre a la calle principal.
En la capital riojana, el apuro o un acto fallido mezcló a ambos ex presidentes y un albergue estudiantil fue rotulado “Carlos Néstor Kirchner”, hasta que alguien enmendó el error y colocó los nombres en el orden correcto, aunque quedó testimonio fotográfico de toda la secuencia.
Guillermo Moreno rebautizó Kirchner al auditorio principal del Mercado Central y, más juguetón, le puso “Lupín” (el apodo con el que los santacruceños llamaban al ex presidente) al Centro de Formación Profesional de Cocineros Sociales que funciona en el mismo predio. Otro homenaje curioso es el de los responsables de una granja infantil en Luján de Cuyo (Mendoza) que denominaron “Néstor.C.Kirchner” al picadero donde adiestran los caballos.
Todo se va acumulando en la web como sonrojante testimonio del renovado culto al personalismo, otra de las ganancias de esta década. Como la foto que testimonia el paso de Santiago Bal y su elenco por la “Casa de la Historia y la Cultura del Bicentenario Presidente Néstor Kirchner” de Las Grutas (Río Negro), donde presentaron este verano el vodevil “Trampa para tramposos”. Un festín para semiólogos.
