¿Raro experimento?
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Desde el domingo último no
logro sacar de mi cabeza el concepto " raro experimento" con el
que Guillermo Berto, periodista del diario Río Negro, calificara el apoyo
explícito de candidatos presidenciales de distintas fuerzas políticas a
la lucha que protagonizo por acceder a la gobernación de la provincia.
Después de mucho meditarlo, voy a descartar de plano que su intención haya sido "ridiculizar" el hecho. Me preocupa mucho más que no lo comprenda, e incluso que no lo celebre.
Lo cierto es que Mauricio Macri, Sergio Massa, Ernesto Sanz y Julio Cobos han hecho explícito sus apoyos a mi candidatura, inaugurando una modalidad política de altura inimaginable para una Argentina construida sobre la confrontación feroz y la competencia por la competencia misma.
Neuquén es una provincia políticamente dominada por una misma familia desde hace ya más de 50 años. Es el último resabio de feudalismo político que subsiste en nuestro país, donde hace ya bastante tiempo culminó la era Saadi en Catamarca, así como la de la familia Romero Feris en Corrientes.
Los Sapag han superado holgadamente la permanencia de Francisco Franco en el poder de España y la de Fidel Castro en Cuba. Ya estamos entre los récord Guinness, y a Berto le parece un " raro experimento" que la dirigencia de nivel presidencial no Kirchnerista apoye una candidatura en capacidad de poner fin a este absurdo.
Para esta ocasión, con un nivel de soberbia difícil de comprender, Sapag ha designado a un gris contador público, desconocido por el 50 % de la población, para ocupar formalmente el sillón de gobernador que Jorge Augusto manejará a su gusto desde el living de su casa. Ha llegado muy lejos. El dominio que supone tener ya ni siquiera precisa de su apellido.
Cualquier " incondicional" puede llenar el sillón, creen ellos. Para el periodista Berto esa situación es absolutamente normal. Aún con Sapag declarando que él se transformará en un "hombre de consulta".
Después de mucho meditarlo, voy a descartar de plano que su intención haya sido "ridiculizar" el hecho. Me preocupa mucho más que no lo comprenda, e incluso que no lo celebre.
Lo cierto es que Mauricio Macri, Sergio Massa, Ernesto Sanz y Julio Cobos han hecho explícito sus apoyos a mi candidatura, inaugurando una modalidad política de altura inimaginable para una Argentina construida sobre la confrontación feroz y la competencia por la competencia misma.
Neuquén es una provincia políticamente dominada por una misma familia desde hace ya más de 50 años. Es el último resabio de feudalismo político que subsiste en nuestro país, donde hace ya bastante tiempo culminó la era Saadi en Catamarca, así como la de la familia Romero Feris en Corrientes.
Los Sapag han superado holgadamente la permanencia de Francisco Franco en el poder de España y la de Fidel Castro en Cuba. Ya estamos entre los récord Guinness, y a Berto le parece un " raro experimento" que la dirigencia de nivel presidencial no Kirchnerista apoye una candidatura en capacidad de poner fin a este absurdo.
Para esta ocasión, con un nivel de soberbia difícil de comprender, Sapag ha designado a un gris contador público, desconocido por el 50 % de la población, para ocupar formalmente el sillón de gobernador que Jorge Augusto manejará a su gusto desde el living de su casa. Ha llegado muy lejos. El dominio que supone tener ya ni siquiera precisa de su apellido.
Cualquier " incondicional" puede llenar el sillón, creen ellos. Para el periodista Berto esa situación es absolutamente normal. Aún con Sapag declarando que él se transformará en un "hombre de consulta".
Dice Berto que el apoyo de varios candidatos presidenciales a mi candidatura corre el riesgo de alta " inestabilidad". No sé a qué se refiere. Ni tampoco sé cómo no ve " riesgo de inestabilidad" en el modelo de poder por delegación que nos propone el sapagismo.
¿Se le puede prestar el poder a una persona , aunque sea absolutamente incondicional? ¿Han resultado viables los casos conocidos en el país y en el mundo parecidos a este? No, no han resultado viables.
Estimado Berto, la Argentina intenta desde hace ya 30 años funcionar como una República. Todavía no lo logramos. Neuquén, todavía feudalizada por una familia, es una de las tantas materias pendientes que el intento republicano todavía no resuelve. Lo "raro", a lo largo y a lo ancho del planeta, es la feudalizacion. Lo moderno y democrático es lo plural, la conjunción pacífica de lo diverso. Con todo respeto, amigo periodista, piénselo de nuevo.
Horacio
“Pechi” Quiroga
Candidato
a gobernador NCN
