JUNÍN DE LOS ANDES (ASM).- La familia del policía José Aigo, asesinado en el 2012, denunció "manipulación política" en la causa por falso testimonio y encubrimiento calificado que terminó días atrás con la absolución confirmada por el TSJ de Marcos Fernández y Analía Godoy, quienes habían sido condenados en primera instancia. En duro pronunciamiento, repudiaron a los "jueces parásitos y acomodados políticos", que "con bajeza profesional dejan en evidencia lo grande que les queda el cargo". Sostienen la sospecha de corrupción para "limpiar el nombre de los hijos de los políticos a cualquier costo", recordando que Fernández es hijo del intendente de San Martín de los Andes.
Por el crimen continúan prófugos Jorge Salazar Oporto y Alexis Cortés Torres, sindicados como miembros de organizaciones políticas clandestinas surgidas en Chile. Fernández era el conductor de la camioneta en la que se desplazaban cuando ocurrió el asesinato del sargento, el 7 de marzo de 2012 en proximidades de Junín de los Andes.
Marcela Aigo, hermana del policía, dijo que desde que se iniciaron las actuaciones "ha habido una decisión concreta de limpiar el apellido de la familia Fernández", pero afirmó que "la gente de Junín y San Martín de los Andes sabe muy bien qué pasó y qué hizo (Marcos) Fernández...".
A poco de conocerse el fallo de la Corte neuquina que ratificó la absolución del Tribunal de Impugnación, la familia Aigo ofreció ayer una rueda de prensa en la que hizo un largo recuento de "irregularidades" en la causa, las cuales ya había denunciado en otras ocasiones. Pidieron al gobernador Jorge Sapag que revise las acciones de los "jueces malintencionados" para que "verdaderamente la sociedad se sienta protegida".
Luego, en diálogo con este diario y Radio Nacional, Marcela Aigo, cuestionó el desempeño de varios funcionarios judiciales que pasaron por el expediente. Recordó que en las audiencias del primer juicio, el único juez que votó en contra de las acusaciones "se quedaba dormido en la sala adelante de todo el mundo"; enfatizó que "hubo claras irregularidades" en el desempeño del primer juez de instrucción (Joaquín Cosentino), por lo que "pedimos el juicio político y fue cajoneado". Además, subrayó que el último fallo, el de la Sala Penal del TSJ, "dedica dos páginas a criticar a los fiscales que aportaron gran cantidad de pruebas concretas (contra la pareja), que no fueron tenidas en cuenta, desechadas o anuladas...".
"Nuestra familia ha venido padeciendo en esta causa y este desenlace, que repudiamos; pero queremos decir que no sólo estamos atentos a lo que pasa con nuestro hermano, esposo y padre, sino que también vemos cosas similares en otros hechos". Como ejemplo mencionaron la investigación de la muerte de Zulema Porma, cuyo imputado está en libertad, y la condena en suspenso a Matías Ancatel por el abuso sexual que cometió contra una nena. "Lo que vemos aquí son jueces que se están olvidando de que el pueblo necesita justicia...", recalcó.
