El presidente electo Mauricio Macri quiere que la ceremonia de traspaso presidencial se realice el próximo 10 de diciembre en la Casa de Gobierno, lo que representaría un cambio con lo que viene sucediendo desde hace años.
Aunque en rigor de verdad significaría recuperar la tradición que se modificó después de la debacle de 2001, informó Parlamentario.com.
Representantes de Cambiemos que organizan la ceremonia de traspaso presidencial con el Gobierno nacional quieren que la misma tenga lugar en la Casa de Gobierno y no en el Congreso. Allí se realizó el traspaso a partir de 2003, y tuvo lugar precisamente a partir de la asunción de Néstor Kirchner.
Este tironeo en torno al lugar donde se hará el traspaso del poder tiene que ver muy probablemente con la movilización convocada por el kirchnerismo al Congreso de la Nación para el día del recambio presidencial.
Tampoco escapa a las especulaciones la perspectiva de que los palcos del Congreso podrían estar colmados ese día con militantes kirchneristas que podrían generar un clima adverso para el nuevo presidente.
Por su parte, el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, confirmó que la ceremonia de entrega de mando se realizará en el Congreso y no en la Casa Rosada, y advirtió que "no tienen por qué cruzarse o haber conflictos" entre los militantes kirchneristas y los que apoyen la llegada del presidente electo, Mauricio Macri.
"No puede ser en la Casa de Gobierno, no lo dice la ley; con todo respeto, no puede ser en Barrio Parque", ironizó el ministro, sobre la pretensión del macrismo, de hacer el traspaso en la Casa Rosada y no en el Congreso.
Sobre el posible choque de militantes que ocasionaría tal posibilidad, el 10 de diciembre, Fernández sostuvo que "no tiene por qué cruzarse ni haber conflictos, que nadie los busca; hay que hacer las cosas de la mejor manera posible".
Fuentes DyN y Parlamentario.com
