Todas las expectativas turísticas de la temporada neuquina se posan en el histórico eclipse solar que tendrá lugar en el cielo el lunes 14 de diciembre. Aunque falten meses y se desconozca sobre la posibilidad de circulación por el aislamiento social preventivo, las autoridades ruegan que ya esté habilitado el turismo, ya que esperan más de diez mil personas de todo el mundo.
“El fenómeno se va a ver de una forma espectacular en toda la provincia de Neuquén, pero va a tener un margen más amplio en lugares como Piedra del Águila, donde alcanzará uno de los puntos máximos”, aseguró a LMN Roberto Figueroa, astrónomo a cargo del Observatorio neuquino.
La esperanza de los científicos está puesta en este eclipse ya que por los próximos 28 años no se darán nuevos eventos en la Patagonia. Es por eso, que desde hace años, cuando se conoció la noticia del eclipse, miles de investigadores científicos de todo el mundo realizaron sus reservas para llegar a Neuquén y estudiar el fenómeno. Según contó a este diario Agustín Roca, referente de la Cámara de Hoteleros de San Martín: “Están ocupadas casi en su totalidad las camas de San Martín, Junín, Villa la Angostura, Las Coloradas y Piedra del Águila”. En un 80% estas reservas están hechas por gente que viene del exterior.
Si bien el mundo se encuentra atravesando la pandemia de coronavirus que mantiene las fronteras cerradas, aún “no hay ningún tipo de cancelación”, y en caso de que haya alguna “se irán recontratando las camas”, aclaró Roca.
Sin embargo, no es tan simple como parece, ya que gran parte de estas reservas fueron hechas hace años y pagadas en dólares. “Sería realmente un gran problema para todos los hoteleros de la zona, ya que el dinero de esas reservas ya lo gastamos en otras inversiones”, aseguró el referente de la Cámara, que además explicó: “El precio de esas reservas ya no es el mismo. Esos 100 dólares que en su momento pagaron por la habitación hoy en día son 40”. Lo que complica aún más la situación de los hoteleros en caso de que tengan que dar marcha atrás con las reservas.
Todas las esperanzas del rubro están puestas en que “de alguna u otra manera para diciembre esté todo solucionado y puedan entrar los extranjeros al país”. Sin embargo, la ven complicada, ya que para que eso suceda “deben abrir los vuelos internacionales y encontrar la forma de llegar hasta Neuquén”.
Además, no son los hoteles los únicos que se encuentran en esa situación. “Esto se extiende a todas las reservas ya pagadas en transporte, salidas recreativas como la pesca, el rafting, las cabalgatas y todas las actividades de camping”, aclaró Roca.
Piedra del Águila, punto máximo del eclipse
Pese a que el eclipse podrá verse desde gran parte de la Patagonia, y desde todo Neuquén, el sitio buscado por los especialistas es Piedra del Águila “ya que allí se verá el punto cúlmine del fenómeno”, aclaró Figueroa.
La ciudad se viene preparando para el 14 de diciembre desde hace tiempo y según confirmó Martín Rucci, Director de Turismo de la ciudad, “hasta el año pasado esperábamos que unas 10 mil personas arriben al lugar”. Desde ese entonces ya hay reservas que “han ocupado las 200 plazas hoteleras con las que cuenta la ciudad”. Ahora, según confirmó, están "esperando que para septiembre se activen los vuelos internacionales, aunque la vemos complicada”.
“Lamentablemente no se puede cambiar la fecha del eclipse, y así recibamos a miles de extranjeros o simplemente seamos la gente del lugar tenemos que seguir trabajando en la organización y en las distintas prevenciones necesarias para la vista, por los problemas que puede ocasionar la exposición directa al sol”, aclaró. Para eso ya han elegido un lugar al costado de la ruta que “es amplio y con árboles para la sombra, ya que el eclipse va a ser de día”.
En este sentido, el astrónomo Figueroa aseguró: “Es recomendable tener equipos específicos para ver este fenómeno”. Usar algún tipo de filtro que reduzca el impacto solar, ya que “va a ser un eclipse bastante intenso”. Para ello, “los especialistas cuentan con equipos de última generación que permiten tener apreciaciones mucho más certeras sobre la corona solar”.
Aunque aún no saben con cuánto público podrán contar, saben que “estos fenómenos mueven mucha gente de distintos puntos del mundo y aunque no sabemos si será un número alto de asistentes, sabemos que tenemos que trabajar aunque sea un número reducido”.
Por eso ya han organizado charlas y actividades recreativas con respecto al eclipse. Incluso han generado una página web en conjunto con especialistas de la Universidad Nacional del Comahue para difundir las importancias del fenómeno en la provincia (http://eclipse2020.uncoma.edu.ar).
Aún así, hay dos grandes preocupaciones con respecto a las jornadas organizadas. Por un lado, son conscientes que en medio del aislamiento no podrán “organizar los shows de música que teníamos pensados”. Pero además, los campings de la ciudad “no se encuentran en condiciones ni están habilitados y hay que hacer reformas ya que solo abren en verano”.
Aunque no exista la posibilidad de organizar grandes eventos y se desconozca la posibilidad de que miles de científicos del mundo arriben a la localidad neuquina, desde la Municipalidad están encargados de acondicionar la ciudad. Aunque ya anticipan: “No sabemos qué irá a pasar, pero sí seguramente tengamos que seguir manteniendo la distancia social hasta que llegue la vacuna”.
Un eclipse único
El eclipse se iniciará a las 11:46 am del 14 de diciembre y tendrá su punto cúlmine a las 13:09, cuando el sol será bloqueado completamente por la luna nueva, volviéndolo un cuerpo totalmente negro. “Va a tener una duración de tres horas y será realmente hermoso, no solo cuando esté en su punto cúlmine, sino también cuando empiece a salir de la oscuridad”.
Observar este tipo de fenómenos, según aclaró Figueroa, “sirve para estudiar los máximos y mínimos de actividad que tiene el sol, que incide sobre las cosechas, la pesca y los nacimientos”. La idea con la que se acercan tantos investigadores a tierras neuquinas para observar el cielo “es poder hacer una aproximación a nivel mundial sobre lo que pueda pasar con cosechas, plagas y otro montón de estudios que sirven para entender los movimientos de la naturaleza”.
