Lula resolvió comprar 36 cazabombarderos Rafale en u$s 6.200 millones Se dejaron de lado el Gripen NG de la sueca Saab, y el F-18 Super Hornet. (Vea el video con las bondades del avión).
Río de Janeiro.- El presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, ya definió en favor de la francesa Dassault la licitación para la compra de 36 nuevos cazabombarderos para la Fuerza Aérea Brasileña (FAB), aseguró hoy el diario "Folha de Sao Paulo".
Según el rotativo, la decisión en favor de los Rafale fue tomada después de que el fabricante francés aceptara bajar de 8.200 millones a 6.200 millones de dólares el precio para los 36 Rafale.
Pese al significativo recorte, el avión francés sigue siendo más caro que el Gripen NG de la sueca Saab, apuntado por el informe técnico de la Aeronáutica como el ganador de la licitación, en la que intervino también la estadounidense Boeing, con el F-18 Super Hornet.
De acuerdo al reportaje publicado por la columnista política Eliane Cantanhede, Boeing propuso venderle a Brasil los 36 cazabombarderos F-18 por 5.700 millones de dólares, mientras que los Gripen NG costarían aún menos, 4.500 millones de dólares.
En el informe técnico elaborado por la Aeronáutica, los Rafale preferidos de Lula y de su ministro de Defensa, Nelson Jobim, aparecieron en último lugar en la licitación, lo que generó cierta tensión en las relaciones con los militares.
Según Cantanhede, la propuesta de descuento fue presentada a Jobim el sábado último, durante un rápido paso del ministro brasileño por París, acompañado por el secretario de Economía y Finanzas de la Aeronáutica, brigadier Aprigio Azevedo, y fue suficiente para definir la licitación en favor de los Rafale.
La decisión ya fue comunicada al comandante de la Aeronáutica, el brigadier Juniti Sato, quien habría reaccionado a la noticia "desolado" pero "dispuesto a respetar la posición política del Planalto (Presidencia) y de la Defensa", agrega el informe.
El reportaje agrega que, para justificar la decisión de ignorar las conclusiones del informe técnico militar, el gobierno esgrimirá argumentos políticos y estratégicos.
"La base de la justificación será la de que el F-18 es estadounidense y el Gripen NG tiene componentes de Estados Unidos, como el motor, y ambos dejarían a Brasil vulnerable", afirma Cantanhede.
Según el informe, el gobierno recordará que, en el pasado, Estados Unidos impidió la fábrica brasileña de aviones Embraer vender aviones Super Tucano a Venezuela, por tener partes fabricadas en el país norteamericano.
En el caso del Gripen NG, Jobim argumentará que, por ahora, ese modelo de avión "es sólo un proyecto", y que el cazabombarderos es fabricado con componentes de varios países, lo que podría exigir múltiples negociaciones para venderlos al exterior.
El informe agrega que Dassault estima en 4.000 millones de dólares los gastos de la Fuerza Aérea Brasileña (FAB) con los trabajos de mantenimiento de los Rafale a lo largo de los próximos 30 años.
Río de Janeiro.- El presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, ya definió en favor de la francesa Dassault la licitación para la compra de 36 nuevos cazabombarderos para la Fuerza Aérea Brasileña (FAB), aseguró hoy el diario "Folha de Sao Paulo".
Según el rotativo, la decisión en favor de los Rafale fue tomada después de que el fabricante francés aceptara bajar de 8.200 millones a 6.200 millones de dólares el precio para los 36 Rafale.
Pese al significativo recorte, el avión francés sigue siendo más caro que el Gripen NG de la sueca Saab, apuntado por el informe técnico de la Aeronáutica como el ganador de la licitación, en la que intervino también la estadounidense Boeing, con el F-18 Super Hornet.
De acuerdo al reportaje publicado por la columnista política Eliane Cantanhede, Boeing propuso venderle a Brasil los 36 cazabombarderos F-18 por 5.700 millones de dólares, mientras que los Gripen NG costarían aún menos, 4.500 millones de dólares.
En el informe técnico elaborado por la Aeronáutica, los Rafale preferidos de Lula y de su ministro de Defensa, Nelson Jobim, aparecieron en último lugar en la licitación, lo que generó cierta tensión en las relaciones con los militares.
Según Cantanhede, la propuesta de descuento fue presentada a Jobim el sábado último, durante un rápido paso del ministro brasileño por París, acompañado por el secretario de Economía y Finanzas de la Aeronáutica, brigadier Aprigio Azevedo, y fue suficiente para definir la licitación en favor de los Rafale.
La decisión ya fue comunicada al comandante de la Aeronáutica, el brigadier Juniti Sato, quien habría reaccionado a la noticia "desolado" pero "dispuesto a respetar la posición política del Planalto (Presidencia) y de la Defensa", agrega el informe.
El reportaje agrega que, para justificar la decisión de ignorar las conclusiones del informe técnico militar, el gobierno esgrimirá argumentos políticos y estratégicos.
"La base de la justificación será la de que el F-18 es estadounidense y el Gripen NG tiene componentes de Estados Unidos, como el motor, y ambos dejarían a Brasil vulnerable", afirma Cantanhede.
Según el informe, el gobierno recordará que, en el pasado, Estados Unidos impidió la fábrica brasileña de aviones Embraer vender aviones Super Tucano a Venezuela, por tener partes fabricadas en el país norteamericano.
En el caso del Gripen NG, Jobim argumentará que, por ahora, ese modelo de avión "es sólo un proyecto", y que el cazabombarderos es fabricado con componentes de varios países, lo que podría exigir múltiples negociaciones para venderlos al exterior.
El informe agrega que Dassault estima en 4.000 millones de dólares los gastos de la Fuerza Aérea Brasileña (FAB) con los trabajos de mantenimiento de los Rafale a lo largo de los próximos 30 años.
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