Jamaiquinos buscan a alguien que les devuelva la paz. Tras el sueño de un nuevo Bob Marley - Piedra OnLine

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jueves, 3 de junio de 2010

Jamaiquinos buscan a alguien que les devuelva la paz. Tras el sueño de un nuevo Bob Marley


Soldados y grupos de voluntarios asisten a la población más carenciada en el barrio de Trench Town, donde vivió el cantante. Allí la tasa de desempleo ronda el 60%.
En medio de la violencia de las bandas narco, recuerdan con nostalgia el pacifismo del cantante. KINGSTON.- En los barrios marginales de Kingston las cosas están claras: todo el mundo odia a la policía, desprecia a los políticos y las bandas criminales se matan entre ellas. Y para muchos, el único que podría devolver la paz es el rey del reggae: Bob Marley.

El único problema es que Bob Marley, el jamaiquino más famoso del mundo, murió hace 30 años...

Después de una semana de violencia causada por el asalto al bastión de un jefe narcotraficante requerido por Estados Unidos y que dejó más de 70 muertos, muchos se acuerdan con nostalgia el discurso pacifista del cantante.

"Jamaica necesita un nuevo Bob Marley, un líder carismático", asegura Prince Alla, 60 años y músico. Considera que los políticos son responsables del mal momento que atraviesa el país, "nos llenan de alcohol en el momento de las elecciones y luego nos abandonan".

"Hoy en día muchos músicos hablan del problema sin abordar la solución y se convierten ellos mismos en el problema", explica Alla refiriéndose a una nueva generación de cantantes que glorifican la violencia.

Marley fue víctima de la violencia entre bandos políticos en su país y en 1976 resultó herido de bala junto a su mujer en un ataque cometido por pistoleros cuando organizaba un concierto gratuito en Kingston para promover la reconciliación nacional y la paz.

Todavía hoy los jamaiquinos más pobres tienen presente la letra de una de sus canciones "Get Up, Stand Up", que los incitaba a luchar para obtener sus derechos.

Pero Trench Town, el barrio de Kingston inmortalizado en la canción "No Woman, no Cry", ya no tiene nada de romántico. Los perros errantes y las cabras mastican los escasos alimentos que consiguen en los basureros desbordados, entre una alcantarilla rota y un extenso baldío donde los niños juegan al fútbol.

Los soldados han instalado puntos de control en las entradas del barrio, porque cerca de allí, en Tivoli Gardens, se encuentra el refugio del jefe narcotraficante Christopher "Dudus" Coke, buscado por la policía y requerido por la justicia estadounidense.

Las cosas han empeorado desde la desaparición de Marley. "Cuando Bob estaba vivo no teníamos todos estos problemas. Éramos pobres pero ricos espiritualmente", constata Sophia Dowe, de 41 años.

Pero hoy en día Trench Town, donde todavía se conserva la casa del cantante y su esposa Rita, la tasa de desempleo ronda el 60%.

(AFP)

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