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domingo, 12 de diciembre de 2010

Chimentos políticos que se lleva el viento


Malestar en UNE con el acto organizado por Farizano. Brillo se lució en Montevideo hablando sobre el gas neuquino. La interna del MPN. Mucho champagne y charlas políticas, una combinación letal. Las “inversiones” que se hacen para mantener la paz social: motivo de críticas ácidas.
El ex presidente uruguayo Lacalle, con José Brillo (foto gentileza)

· Parece que cayó mal en UNE la decisión de los organizadores del acto por el tercer aniversario de la coalición que llevó a Martín Farizano a la intendencia, que se hizo en Pacífico este viernes, porque se dio prioridad a los intendentes como figuras rutilantes, dejando de lado al partido que propone como candidato a intendente a Mariano Mansilla. Se consideró que no se había tomado en cuenta “el gran caudal de votos” que aportó ese partido. La cuestión fue que UNE decidió estar presente sólo con el secretario de Gobierno municipal, Raúl Dobrusín, y un puñado de militantes. Al principio, se había resuelto que Mansilla subiera al palco y hasta que pronunciara un breve discurso, pero –según se comentó con tono airado- Farizano le fue bajando el perfil. "Queríamos que este acto fuese un lanzamiento político de la coalición" se escuchó decir a un alto dirigente de UNE. Farizano, en cambio fue tajante: no se ha lanzado nada todavía.

· Muy contento se lo vio al diputado nacional José Brillo, tras haber participado el jueves en Montevideo, Uruguay, del Seminario Internacional sobre Opciones de Diversificación de la Matriz Energética. Brillo representó al país, como vicepresidente que es de la Comisión de Energía de la Cámara de Diputados. En el encuentro hubo importantes personajes de la política sudamericana, como el ex presidente uruguayo Luis Alberto Lacalle, por ejemplo. Brillo aprovechó para disertar sobre el tema del gas neuquino, y particularmente de lo que implican los yacimientos “no convencionales”. El neuquino convocó a la prudencia en la consideración de este recurso, teniendo en cuenta que sus réditos económicos se verán de a poco y gradualmente. Estuvo muy firme el diputado en destacar que sería necesario considerar un aumento en el precio del gas convencional, que hoy se importa mayormente de Bolivia y por barcos metaneros, a un precio alto que a Neuquén no se le reconoce. Después de su visita al otro lado del “charco”, volvió a Neuquén para sumergirse en la interna del MPN, en la que defiende la posición de la Junta de Gobierno, en contraposición con lo que reclama la Convención partidaria. A propósito, el sector de la Lista Azul le había bajado el tono a los reclamos en las últimas horas. La posibilidad de acudir a la Justicia, según se comentó, se enfriaba.

· Se habló mucho de la interna del MPN y de lo que puede pasar en la política neuquina, entre periodistas que asistieron al agasajo anual de la empresa YPF. Hubo saladitos y fiambres de entrada, choricitos, morcillas y mollejas, y por supuesto asado, de vaca, chivito y cordero. Todo regado con vinos de bodegas neuquinas, y luego con champagne, que se utilizó para brindar, y después, en una sobremesa que se extendió largamente hasta casi las 6 de la tarde. Allí, uno de los directivos de la petrolera, que está a punto de cubrir un importante cargo en el exterior, dio cátedra sobre champagne y enalteció la calidad de un champagne neuquino, de Bodegas del Fin del Mundo: dice que es muy superior a cualquier otro de producción nacional. El hombre sabe y tiene mundo, así que habrá que creerle. En fin, la charla sobre política discurrió en esa sobremesa y hubo una aproximación en los pronósticos: la mayoría no encontró razones de peso como para vaticinar un cambio de partido (MPN) en el gobierno. Claro que a la hora en que se sacó esa primera conclusión, ya las neuronas estaban un poco nubladas por las libaciones.

· Antes, se comentó la charla que había tenido uno de los periodistas con un destacado hombre de la oposición al MPN, que actualmente no comulga tampoco con el candidato a gobernador por la UCR, Martín Farizano. El tema de la charla había girado sobre cuestiones económicas, y particularmente, de cuánta plata se “invierte” en mantener aceitadas las relaciones con el sindicato municipal. “Se habló de unas 20.000 horas extras por mes” que son generosamente distribuidas. Ante el comentario, enseguida saltó otro hombre de prensa, y tiró sobre la mesa una pregunta insidiosa: “¿y cómo te parece que se invertirá la platita fresca que dispondrá el gobierno de la provincia, sino en contentar a los sindicatos para que no haya quilombos el año que viene?”. Pocas horas después, se conocía la noticia del ofrecimiento salarial al gremio docente: más de 20 por ciento de aumento.

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