El candidato del Frente Grande estuvo en el cierre de campaña de Bertoldi, en Centenario. Fue uno de sus discursos más agresivos contra Sapag, a quien acusó de concentrar el poder en su propia familia. Javier Bertoldi y Martín Farizano (foto gentileza prensa partidaria)
Martín Farizano, el candidato a gobernador del Frente Neuquino, acusó al MPN de dejar de ser un “partido popular” para convertirse en “un partido conservador que ha construido una oligarquía que maneja el partido, el gobierno y el Estado”.
Una “peña familiar” organizada por el intendente y candidato a la reelección en Centenario, Javier Bertoldi, fue el escenario elegido para arrojar estos últimos dardos de campaña, en el gimnasio del Colegio Parroquial, en el Casco Viejo, que se vio colmado por una nutrida asistencia de vecinos.
En su discurso, Martín Farizano analizó la creación del Frente Neuquino y la necesidad de construir una verdadera opción de cambio basada sobre el trabajo de las coincidencias entre varios intendentes.
El candidato no guardó críticas para el partido provincial que “ha dejado de ser un partido popular para ser un partido conservador que ha construido una oligarquía que maneja el partido, el gobierno y el Estado”. Asimismo se refirió a la situación de asfixia que imponen en municipios que no pertenecen al MPN y lo responsabilizó por los altos niveles de pobreza que no condicen con una provincia rica.
“No puede ser que en una provincia tan rica haya tanta pobreza. El estado es un desquicio porque no tiene conducción. No puede manejarse con un grupito de personas que concentran el poder”, aclaró Farizano.
Y ejemplificó que la obra más grande que va a tener la provincia, Chihuidos es manejada por el hermano del gobernador. Asimismo recordó que “el 60 por ciento de las obras de la provincia, son ejecutadas por CN Sapag, que pertenece al otro hermano del gobernador”.
“Estamos cansados de tanta concentración de poder. Porque cuanto más se concentra el poder más se dispersa la pobreza”, dijo.
Martín Farizano, el candidato a gobernador del Frente Neuquino, acusó al MPN de dejar de ser un “partido popular” para convertirse en “un partido conservador que ha construido una oligarquía que maneja el partido, el gobierno y el Estado”.
Una “peña familiar” organizada por el intendente y candidato a la reelección en Centenario, Javier Bertoldi, fue el escenario elegido para arrojar estos últimos dardos de campaña, en el gimnasio del Colegio Parroquial, en el Casco Viejo, que se vio colmado por una nutrida asistencia de vecinos.
En su discurso, Martín Farizano analizó la creación del Frente Neuquino y la necesidad de construir una verdadera opción de cambio basada sobre el trabajo de las coincidencias entre varios intendentes.
El candidato no guardó críticas para el partido provincial que “ha dejado de ser un partido popular para ser un partido conservador que ha construido una oligarquía que maneja el partido, el gobierno y el Estado”. Asimismo se refirió a la situación de asfixia que imponen en municipios que no pertenecen al MPN y lo responsabilizó por los altos niveles de pobreza que no condicen con una provincia rica.
“No puede ser que en una provincia tan rica haya tanta pobreza. El estado es un desquicio porque no tiene conducción. No puede manejarse con un grupito de personas que concentran el poder”, aclaró Farizano.
Y ejemplificó que la obra más grande que va a tener la provincia, Chihuidos es manejada por el hermano del gobernador. Asimismo recordó que “el 60 por ciento de las obras de la provincia, son ejecutadas por CN Sapag, que pertenece al otro hermano del gobernador”.
“Estamos cansados de tanta concentración de poder. Porque cuanto más se concentra el poder más se dispersa la pobreza”, dijo.
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