Prefectos y gendarmes siguen con la protesta el fin de semana largo - Piedra OnLine

InformaciĆ³n del Mundo

sƔbado, 6 de octubre de 2012

Prefectos y gendarmes siguen con la protesta el fin de semana largo

El mate en una mano, el celular en la otra y una comunicaciĆ³n que finaliza. La cara de decepciĆ³n lo explica todo. Pero el suboficial que dice llamarse Juan –aunque luce la chapita identificatoria cubierta por una cinta negra–, comparte el contenido de la charla con un grupito que espera sentado en el cĆ©sped, de frente a la puerta del Edificio Guardacostas, donde suelen sentarse a descansar: “Me dicen que no hay nada. Seguimos como hasta ahora. Hay que esperar al martes. Traigan la almohada, de acĆ” no nos vamos mĆ”s”.
¿Y el fin de semana?, pregunta ClarĆ­n. (Leer en mĆ”s informaciĆ³n)


“MĆ”s que nunca nos quedamos de guardia y el lunes vamos a ser muchos mĆ”s. Para que sepan que si no atienden nuestro petitorio la cosa puede ser peor”. La comunicaciĆ³n entre los manifestantes es asĆ­, de boca en boca, sin interlocutores formales y a veces con mucha desinformaciĆ³n. Este, de todos modos, no era el caso: el descontento se mantiene firme. El llamado a una convocatoria mayor para el lunes tiene que ver con una forma de meterle presiĆ³n a quienes participarĆ”n del encuentro en el ministerio de Seguridad.
La sensaciĆ³n que dejaban entrever los efectivos en Puerto Madero, donde habitan los prefectos, y en Retiro, donde estĆ” el edificio Centinela y pasan sus horas los gendarmes rebeldes, es que la reuniĆ³n no arrojarĆ­a los resultados que el sector mĆ”s duro espera.
Si no, suponen, ya se habrĆ­a resuelto el conflicto y levantado la protesta.
El martes se verĆ”n las caras el secretario de Seguridad, Sergio Berni, y los flamantes jefes designados por la ministra Nilda GarrĆ©: el comandante general Enrique Zach, en GendarmerĆ­a ,y el prefecto general Luis Alberto Heiler. TambiĆ©n acudirĆ” una comisiĆ³n de representantes de los sectores que protestan, quienes plantearĆ”n que se cumpla el petitorio presentado el martes, cuando estallĆ³ la crisis. En ese texto piden, entre otras cosas, que se les reconozca un bĆ”sico de 7 mil pesos, que no haya sanciones para quienes se manifiestan, una cobertura social en todo el paĆ­s y el mismo sueldo para los jubilados .
La estrategia del Gobierno apunta hoy al desgaste de los efectivos. En algĆŗn sentido la Casa Rosada ha acertado: desde que anunciĆ³ que se reintegrarĆ­a el porcentaje de los salarios descontados por el decreto firmado por Cristina y de que se anulara por un tiempo aquella resoluciĆ³n, se vio en las protestas un poco menos de confrontaciĆ³n. Un cabo que participa activamente de las protestas explica que eso responde a que “los que ganan mĆ”s de 7 mil pesos no quieren quilombos y ahora se hacen los distraĆ­dos”.
No todos piensan asĆ­. “Hasta que no haya una resoluciĆ³n del ministerio de Seguridad firmada, no nos vamos a ir”, amenazĆ³ RaĆŗl Maza, uno de los voceros de los gendarmes. El agente de la Prefectura Naval Diego Serrano apuntĆ³ que la medida “sigue” y exhortĆ³ a los suboficiales de la fuerza “a continuar de la misma forma: conscientes y con suma tranquilidad”.
La avenida Madero, epicentro de los reclamos, volviĆ³ a cortarse anoche. QuizĆ” sea una muestra de que el malhumor va en ascenso, al menos para quienes insisten con un aumento de salario. El jueves se habĆ­a liberado una mano para que pudieran transitar los automovilistas, especialmente los camioneros. El nuevo corte volviĆ³ a amontonar camiones y generĆ³ una gran congestiĆ³n, justo el viernes, el peor dĆ­a de la semana para el trĆ”nsito.