PABLO TRUFFA
truffap@lmneuquen.com.ar
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Neuquén
A diferencia de muchos políticos, Ramón Rioseco anda solo, no consulta con anticipación qué se le preguntará y llega a horario a la entrevista. Se muestra tranquilo, pensativo, sereno y más preocupado por salir lindo en la foto que por el off o el on. Se sienta y sin tapujos habla de su pasión: la política. Asegura que está muy bien posicionado a nivel provincial y que las encuestas hoy lo ubican por encima del senador Guillermo Pereyra y debajo de Jorge Sapag. Sabe que la pelea por la gobernación no es fácil y pide la unidad de las fuerzas opositoras, sin dejar a nadie afuera. Pero para que esa premisa tenga futuro, él deberá liderarla. “Estoy en carrera y trabajo para ser gobernador. Sería bueno llegar a un consenso, pero si no hay acuerdo para que yo vaya como gobernador, habrá internas”, dispara y afirma que la mejor fórmula para pelearle al MPN es Rioseco-Quiroga. Pero como eso hoy está muy verde, piensa en otras alternativas. Y sorprende con un nombre: Mercedes Lamarca, concejal de Libres del Sur.
A diferencia de muchos políticos, Ramón Rioseco anda solo, no consulta con anticipación qué se le preguntará y llega a horario a la entrevista. Se muestra tranquilo, pensativo, sereno y más preocupado por salir lindo en la foto que por el off o el on. Se sienta y sin tapujos habla de su pasión: la política. Asegura que está muy bien posicionado a nivel provincial y que las encuestas hoy lo ubican por encima del senador Guillermo Pereyra y debajo de Jorge Sapag. Sabe que la pelea por la gobernación no es fácil y pide la unidad de las fuerzas opositoras, sin dejar a nadie afuera. Pero para que esa premisa tenga futuro, él deberá liderarla. “Estoy en carrera y trabajo para ser gobernador. Sería bueno llegar a un consenso, pero si no hay acuerdo para que yo vaya como gobernador, habrá internas”, dispara y afirma que la mejor fórmula para pelearle al MPN es Rioseco-Quiroga. Pero como eso hoy está muy verde, piensa en otras alternativas. Y sorprende con un nombre: Mercedes Lamarca, concejal de Libres del Sur.
Hace años se decía que Rioseco, tarde o temprano, se metería en la pelea grande. ¿Cree que es el momento?
La aspiración de competir la tenemos, y la aspiración real es muy cercana, porque los números hoy nos dan muy bien tanto en el interior como en la capital, con números que demuestran cómo la gente valora nuestra capacidad de gestión. La gente quiere una persona que resuelva los problemas y que quien comande los destinos de Neuquén sea un líder fuerte, responsable en la administración y que construya un estado sólido, regente y conductor, y no un estado elefante que al ser tan grande se concentre en un solo sector sin dar solución a los problemas estructurales: agua, educación, vivienda, empleo, salud. Eso es lo que ocurre hoy.
¿Y en qué cambió este Rioseco de aquel de 2007?
Hace seis años que soy intendente y creo que cambié en la experiencia, en poder haber puesto en práctica una filosofía política, un modelo mental político que venimos construyendo desde hace 30 años.
Hablar de un modelo político de 30 años significa…
Es hacer referencia a un modelo que creemos que debería ser progresista y eficiente. Un modelo de desarrollo, de ascenso y justicia social. Hace 30 años que me vengo preparando para ser gobernador y tengo una vasta experiencia para serlo. Tengo experiencia en todas las funciones y en todas las responsabilidades, también en la lucha. Tener experiencia, fortaleza y objetivos claros es condición indispensable para ser gobernador.
¿Hacia donde deberán ir?
Queremos un modelo compatible con todas las riquezas de la provincia, porque el modelo actual está agotado. Queremos una renovación con una mirada más moderna, más progresista y mas justa a la forma de gobernar.
Mencionó varias veces la idea de construir un modelo progresista…
Eso es lo que intentamos, porque somos parte de esa mirada…
Pero teniendo en cuenta su posicionamiento y acercamiento con el kirchnerismo, ¿cómo explica la idea de conformar un frente con Quiroga, quien está muy lejos de ser un progresista?
Está lejos, es cierto. Pero creo que los problemas de los neuquinos nos deben unir. En Neuquén somos todos vecinos y nos conocemos todos, como personas y como políticos. Con Quiroga tenemos dos cosas en común: siempre estuvimos en la oposición y siempre quisimos un modelo de provincia distinto. Y esos son puntos centrales, aunque después debemos trabajar en otras cuestiones. Y digo con Quiroga como podría decir con el kirchnerismo, como con el socialismo, el ARI, Libres del Sur, todos los de la vereda opositora al MPN. Proponemos la posibilidad de unirnos, si es que hay consenso, o la de ir a internas abiertas, si no llegamos a un consenso.
Habla de que esto es una pelea entre la oposición y el MPN, y dice que no hay que construir un elefante político sino una especie de pulpo. ¿Cree que el único camino para vencer al MPN y lograr ese objetivo es unirse todos bajo un mismo proyecto?
No necesariamente, porque hay experiencias de alianzas que luego fracasaron. Y fracasaron no por las ideas sino por las vanidades y egoísmos personales de ciertos dirigentes. Eso hace que hoy en ciertos lugares se mire con desconfianza la propuesta de alianza. Por lo tanto, no es literal construir una alianza para ganarle al MPN.
Pero si llegan a un consenso con Quiroga, usted está dispuesto a resignar la candidatura a gobernador para ir juntos.
No, de ninguna manera.
Entonces se considera el líder nato de ese frente opositor.
Nosotros creemos que tenemos una basta experiencia como para estar al frente de la lista de consenso, si es que hubiese. Si no hay consenso para que yo lidere el frente opositor, habrá internas. No cederé el espacio porque trabajamos desde hace tiempo y todos sabemos que estamos bien posicionados, hasta el propio Sapag.
¿Y Quiroga iría como vice de usted?
No lo sé; hemos hablado pero no avanzamos en números de candidatos, sí en alcanzar un acuerdo en común.
Entonces, ¿cuál sería la fórmula ideal para enfrentar al MPN?
Es difícil. Ni yo ni Quiroga tendríamos que ser vice. Para que se interprete, creo que ambos somos útiles en otra posición, de fortalecimiento del espacio, si es que ocurriese una unión. Y si no hay unión, creo que la fórmula perfecta sería Rioseco-Lamarca (risas), aunque nunca hablé con ella. Yo estoy seguro de que seré gobernador, con Quiroga o Lamarca como vice.
No necesariamente, porque hay experiencias de alianzas que luego fracasaron. Y fracasaron no por las ideas sino por las vanidades y egoísmos personales de ciertos dirigentes. Eso hace que hoy en ciertos lugares se mire con desconfianza la propuesta de alianza. Por lo tanto, no es literal construir una alianza para ganarle al MPN.
Pero si llegan a un consenso con Quiroga, usted está dispuesto a resignar la candidatura a gobernador para ir juntos.
No, de ninguna manera.
Entonces se considera el líder nato de ese frente opositor.
Nosotros creemos que tenemos una basta experiencia como para estar al frente de la lista de consenso, si es que hubiese. Si no hay consenso para que yo lidere el frente opositor, habrá internas. No cederé el espacio porque trabajamos desde hace tiempo y todos sabemos que estamos bien posicionados, hasta el propio Sapag.
¿Y Quiroga iría como vice de usted?
No lo sé; hemos hablado pero no avanzamos en números de candidatos, sí en alcanzar un acuerdo en común.
Entonces, ¿cuál sería la fórmula ideal para enfrentar al MPN?
Es difícil. Ni yo ni Quiroga tendríamos que ser vice. Para que se interprete, creo que ambos somos útiles en otra posición, de fortalecimiento del espacio, si es que ocurriese una unión. Y si no hay unión, creo que la fórmula perfecta sería Rioseco-Lamarca (risas), aunque nunca hablé con ella. Yo estoy seguro de que seré gobernador, con Quiroga o Lamarca como vice.
