La presidenta del STJ rionegrino, dice que las críticas sobre la posibilidad de demorar adolescentes se dan “porque nadie lee el fallo”. Sostuvo que la resolución del juez Bustamante ordenaba incumplir las leyes de Protección Integral de Niños y Adolescentes y la Orgánica de la Policía.
“Se ha generado bastante revuelo porque nadie lee el fallo”, aseguró la presidenta del Superior Tribunal de Justicia de Río Negro, Liliana Piccinini. El máximo tribunal de la provincia revocó a finales de mayo la resolución del camarista penal de Viedma Jorge Bustamante, quien había hecho lugar en noviembre a un hábeas corpus preventivo y ordenado a la Policía rionegrina el cese de las demoras de niños y niñas, que no se encuentran cometiendo actos delictivos, con la justificación de brindarles protección.
Piccinini defendió en Bariloche el fallo del STJ. Explicó que intervinieron porque “hay gravedad institucional en el sentido de que hay un juez que está mandando a una institución a no cumplir con un artículo de la ley que está vigente”.
Dijo que el fallo revocado ordenaba a la Policía incumplir la ley 4109, de Protección Integral de los Derechos de los Niños y Adolescentes, y la ley Orgánica de la Policía.
“El STJ ha ingresado en infinidad de veces por gravedad institucional en amparos y hábeas corpus”, sostuvo Piccinini, para refutar los cuestionamientos.
Protección al niño
–¿Cómo la Policía protege a un niño o a un adolescente demorándolo? –preguntó “Río Negro”.
–Es que ese no es el tema. Por eso digo que hay que leer el fallo –respondió–. En ningún momento se habilita a la Policía a detener arbitrariamente. Es más, se los conmina a que eso no se debe hacer ni por razón del aspecto ni por la vestimenta –aseguró.
Dijo que la ley dice que “en cuanto tome contacto con un menor (la Policía) lo tiene que conducir para ponerlo a disposición del órgano técnico proteccional y la familia”.
Piccinini afirmó que en el hábeas corpus, que había presentado la defensora de Menores e Incapaces Patricia Arias y que la Fiscalía de Estado de la provincia impugnó, “no está demostrado que haya una actitud de sistematización de detención de niños y adolescentes en las calles de la provincia de Río Negro, en la ciudad que fuera con conducción de detenidos a la comisaría. Si así hubiera sido, el fallo del Tribunal hubiera sido otro”.
Cuando se le preguntó si la Policía tenía un protocolo como para identificar qué niño o adolescente necesita protección como para demorarlo y llevarlo hasta la comisaría, Piccinini contestó: “Esa es otra cuestión, es una cuestión de capacitación, actitudinal. Usted me está hablando de un hábeas corpus colectivo, eso quiere decir que al colectivo, a un homogéneo se le está privando y vulnerando de continuo los derechos por una institución policial y eso no estaba demostrado en el expediente”.
Apremios y procesos
Respecto de los casos por denuncias por presuntas vejaciones contra adolescentes que involucran a agentes policiales, Piccinini fue tajante. “Ese es otro tema. Ahora si mezclamos todos los temas no nos vamos a entender nunca. Si hay apremios y vejaciones por parte de la Policía, entonces tendrá que haber procesos y juicios y policías exonerados sacados de la fuerza, que no tiene nada que ver con el tema de protección de menores”.
“Nosotros tenemos pero muy claro, y el Poder Judicial trabaja en ese sentido, que no es lo mismo el niño que está en conflicto con la ley penal del niño que no lo está y que solamente tiene una situación de vulnerabilidad en su hogar, en su cotidianidad y eso está bien diferenciado. Acá no se trata a todos por igual y todos entran en la picadora de carne de un proceso de una judicialización”, enfatizó Piccinini.
Dijo que el alerta que provocó el fallo en algunas organizaciones que trabajan por los derechos de los niños y adolescentes es “porque lo tergiversan y si usted se pone en esa posición de generar ese estado de opinión adversa, lo único que hace es generar una confusión también dentro de la fuerza policial”.
“No está demostrado que haya una actitud de sistematización de detención de niños y adolescentes en las calles de Río Negro”.
Liliana Piccinini, presidenta del Superior Tribunal de Justicia.
