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Coco debía encabezar un acto con el gobernador cordobés, Juan Manuel de la Sota, quien se volvió a su provincia por la explosión de un gasoducto. Se trataba de la segunda visita a GyP de un precandidato presidencial en la misma semana, que se inició con la presencia de Sergio Massa.
Para el ministro, en líneas generales, el arco político neuquino, incluidos aquellos que "quieren gobernar la provincia", acuerdan en rechazar la propuesta elaborada por el CEO de YPF, Miguel Galuccio, e impulsada por Nación. "No nos arrogamos que se trata de la posición del MPN, creemos que hay coincidencias en defender los recursos e intereses de los neuquinos", dijo Coco a una radio regional.
Pero fue más allá y aseguró que una vez finalizada la interna del partido provincial, que enfrenta al sector del gobernador Jorge Sapag con el del senador Guillermo Pereyra, la posición "será la misma". De esta manera descartó un acercamiento con el gobierno central más allá de los resultados en las urnas.
En relación a las críticas de los referentes locales del oficialismo nacional, Coco aseguró que los que acuerdan con el proyecto "son muy pocos". Y acto seguido reiteró su crítica al señalar que "es un borrador que busca transferir las riquezas de las provincias a las empresas".
"Hay muchos sectores políticos del país que quieren conocer la realidad de lo que ocurre y eligen venir a GyP", señaló el ministro y mencionó que, además de Massa y De la Sota, fueron contactados por "Radicales, representantes del Partido de Republicano de Mendoza, funcionarios de Chubut y Tierra del Fuego".
Finalmente adjudicó al gobierno nacional una actitud "extorsiva" al no convocar a Mendoza, Río Negro, Chubut y Neuquén -todos enfrentados por la nueva ley- a renegociar sus deudas. Comparó el accionar de Nación con las exigencias, sobre las cuentas del Estado, de los fondos buitre.
"Vamos a salir al frente con o sin desendeudamiento. Somos una de las pocas provincias con presupuesto propio y con capacidad de apalancarnos con crédito internacional", finalizó.
