El titular de Feclir, Roberto Bernardini, sostuvo que el conflicto con la obra social de los jubilados "es el mismo que viene desde hace meses" y radica en los descuentos "injustificados" que realiza en el pago por las prestaciones efectuadas.
A fines de agosto se habían anunciado medidas similares también por la misma problemática, pero finalmente fueron desactivadas por las promesas de pago de la obra social.
"Es lo mismo de siempre. Nosotros facturamos y pese a que hay un convenio donde dicen que no pueden hacer débitos sin poner una causa, igual en los últimos meses nos vienen descontando. Nosotros consideramos que son débitos injustificados y por eso decidimos realizar un corte en las prestaciones por 72 horas", explicó ayer el médico y empresario.
Hubo una reunión el lunes por la tarde donde participaron representantes de clínicas de toda la región. Allí los participantes trazaron un esquema crítico de las dificultades que atraviesan las instituciones por las deudas arrastradas, la dificultad para cancelar deudas a proveedores e inclusive para pagar los sueldos de sus trabajadores.
Por tal razón se decidió comunicar a la obra social de los jubilados la medida de suspensión de cuenta corriente, según se indicó a través de la solicitada publicada ayer y firmada por el Hospital privado regional de Bariloche, Policlínico Ados y Clínica Pasteur de Neuquén, Sanatorio Juan XXIII y Clínica Roca, Sanatorio Río Negro y Policlínico Modelo de Cipolletti y Clínica Central de Villa Regina. Esto implica que los afiliados que requieran atención en las entidades sanatoriales deberán abonar en efectivo por las prestaciones que requieran y luego solicitar el respectivo reintegro.
"No hemos podido reunirnos con ellos (PAMI) pero estuvimos en contacto telefónico aunque hasta el momento no obtuvimos respuesta", finalizó Bernardini.
Agencia Roca.-
